Telefónica prometió renunciar a su reclamo contra Argentina en el Ciadi

La decisión se la comunicó el presidente de la empresa al ministro De Vido. Se suma a lo que anunció Gas Ban

El presidente de Telefónica, César Alierta, le comunicó ayer al ministro de Planificación, Julio de Vido, que la empresa va a renunciar a sus reclamos contra el Estado argentino formulado ante el Ciadi, el tribunal arbitral del Banco Mundial.

Así lo informaron voceros oficiales de la delegación gubernamental argentina en Madrid, las que indicaron además que "en aproximadamente quince días se firmará un acuerdo de renegociación del contrato de concesión" del servicio, y que ello "incluirá el desistimiento del reclamo ante el Ciadi".

Ayer el presidente Néstor Kirchner hizo un llamado público a las empresas de servicios públicos privatizadas para que tengan "gestos" para con el país y señaló que uno sería "levantar las demandas" que interpusieron muchas de ellas contra el país ante el Ciadi.

El presidente aprovechó la oportunidad de un acto político en Lincoln para ratificar además la "firme" postura que mantendrá el gobierno respecto de las negociaciones con las privatizadas y la intención de que desistan de sus demandas en los fueros internacionales.

Kirchner señaló que "si quieren trabajar en el país que vengan con gestos generosos, solidarios que nosotros le abrimos los brazos para producir riquezas, pero con nosotros" e hizo referencia a los casos de Telefónica y Gas Natural BDG, que entre ayer y hoy anunciaron que desistirán de sus respectivas demandas ante el tribunal internacional.

En el caso puntual de Telefónica, los cálculos del gobierno estiman que el reclamo de compensación económica, formulado en julio de 2003 por la accionista principal de la compañía ante el presunto perjuicio económico que le trajo aparejada la devaluación, y pesificación de tarifas, rondaría los 2.800 millones de dólares.

Alierta y De Vido mantuvieron una entrevista en la sede central de la compañía en la capital española, y a su término el vocero gubernamental indicó que "ahora faltan definir algunos detalles técnicos del contrato", reformulado en base a las nuevas condiciones económicas de la Argentina post convertibilidad y post devaluación del peso.

De Vido detalló que durante la reunión "la empresa asumió el compromiso de retirar la demanda ante el Ciadi, escalonadamente, en la medida en que va avanzando el proceso propio planteado por el acuerdo contractual".

La referencia del funcionario implica, primero la suspensión del reclamo y luego, al cerrar un acuerdo definitivo, el previo desistimiento.


Las tarifas pueden esperar
Además, el ministro refirió que "no se habló del tema tarifas, pero sí de inversiones que la empresa realizará en el país", para mantener y aún mejorar la calidad del servicio a su cargo. No obstante, no hubo precisiones al respecto.

Cabe consignar que a principios de este mes, y con relación a las compañías de telefonía básica (Telefónica y Telecom), el ministro refirió que "en las negociaciones -para la readecuación de los contratos- no están previstos incrementos tarifarios para este servicio".

Tras la reunión con los directivos de Telefónica, De Vido se entrevistó con el director de la Oficina Económica del gobierno español, Miguel Sebastián Gascón.

Según voceros argentinos, durante el encuentro "hicieron una evaluación sobre como están evolucionando las relaciones entre los dos países luego del encuentro de principios de año entre el jefe del gobierno (José Luis) Rodríguez Zapatero y el presidente (Néstor) Kirchner.

En ese contexto, agregaron, también se hizo hincapié en "el retiro de los reclamos ante el Ciadi por parte de las empresas españolas, y de los proyectos de inversión previstos por Repsol YPF en Argentina".

Una de las gestiones finales del ministro argentino en España fue la entrevista que mantuvo con la ministro de Fomento e Infraestructura, Magdalena Alvarez, con quien analizó la posible compra de maquinaria ferroviaria a la empresa Renfe, con destino al equipamiento de los ferrocarriles metropolitanos de Buenos Aires.

De Vido y Alierta se reunieron en Madrid.