Negocian el programa crediticio para 2006

El Banco Mundial llamó a la Argentina a respetar el Ciadi

La vicepresidenta del organismo aseguró que ese es el camino para que lleguen las inversiones al país

El Banco Mundial (BM) aseguró ayer el financiamiento para obras públicas y planes asistenciales, aunque no brindó precisiones sobre cómo se destrabará el desembolso de unos 870 millones de dólares que están a la espera de que Argentina alcance un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La vicepresidente del organismo para América latina y el Caribe, Pamela Cox, estuvo ayer de visita en Argentina y llamó a respetar los laudos arbitrales del Ciadi (tribunal arbitral del BM donde el Estado argentino acumula más de 30 denuncias de empresas privatizadas) sirven para atraer inversiones al país. Además, anticipó que ya se trabaja en un nuevo programa de asistencia financiera para cuando concluya el vigente en diciembre próximo.

"Vamos a continuar ayudando a la Argentina, vamos a seguir con el financiamiento de los planes de infraestructura, de Jefas y Jefes de Hogares", dijo Cox durante una conferencia de prensa celebrada en el microcentro porteño.

La ejecutiva del BM consideró que las autoridades "han hecho un trabajo social muy bueno, tanto en los municipios como en las provincias".

"El Banco Mundial tiene una relación con la Argentina que valoramos mucho y el Ciadi tiene su relación propia, es un organismo que se creó para resolver diferendos y su respeto es importante para atraer inversiones", señaló.

El Ciadi es un tribunal arbitral del Banco Mundial donde la Argentina libra más de una treintena de juicios de empresas de servicios públicos afectadas por la caída de sus contratos tras la devaluación. Uno de esos casos ya fue resuelto en contra del Estado argentino, por lo que el que gobierno argentino adelantó que no respetará los fallos.


Créditos pendientes
En otro orden, el BM aprobó el año pasado un plan de financiamiento por 2.000 millones de dólares para Argentina de los cuales hasta ahora sólo se desembolsaron 330 millones. De los restantes 1.670 millones, 870 millones requieren que Argentina logre un acuerdo con el FMI, y los otros 800 millones, de la aprobación del directorio del Banco Mundial. De estos 870 millones de dólares que están supeditados a un acuerdo con el FMI, 500 millones son para la Nación, para un plan de reforma del Estado, y otros 250 para un plan de salud.

Los restantes 120 son para Córdoba, Santa Fe y Catamarca, provincias que pidieron que en lugar de financiar ajustes sean para inversión y que la entidad los desembolse sin la vinculación con lo que decida el Fondo.

En tanto, Cox ratificó que el BM y el gobierno ya trabajan en un nuevo programa que arrancaría en 2006 aunque aclaró que "todavía no sabemos el monto". El acuerdo podría comenzar a regir en 2006, cuando concluya el actual programa de 2.000 millones de dólares aprobado en 2004 con vencimiento en diciembre de 2005.

La funcionaria explicó que el organismo posee dos tipos de líneas de préstamos. "Los primeros son para el desarrollo de infraestructura y planes sociales y no están condicionados a un eventual acuerdo con el FMI", precisó.

Pero la segunda línea de crédito "los de desembolso rápido, para ajustes estructurales, son los que necesitan la aprobación" del FMI, el organismo multilateral con el que Argentina negocia un acuerdo para refinanciar unos 10.000 millones de dólares que vencen hasta el 2007.

Sin embargo, Cox dejó en claro que en todos los casos debe haber una sólida estructura macroeconómica y un cumplimiento estricto de lo comprometido por el gobierno para con el BM. "Hemos tenido experiencia en países donde la economía no estaba bien manejada y donde los créditos se utilizaron de manera inadecuada, pero no es lo que sucede en las naciones de ingresos medios", ejemplificó.

Más allá de esta aclaración, la funcionaria, que estuvo acompañada por el director del BM para Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay, Axel van Trotseburg, trató de restarle importancia a esta dependencia del FMI al señalar que "el 75 por ciento de nuestros planes (en Argentina) son de inversión y de asistencia social", y el resto para ajustes de la economía.

Cox también se reunió con el ministro de Economía, Roberto Lavagna, con quien analizó las necesidades de financiamiento de Argentina para 2006.

La funcionaria, en tanto, destacó que "es muy importante reducir la tasa de mortalidad infantil, y la pobreza, e invertir en educación".

"Creo que Argentina salió de la crisis rápidamente, pero hay efectos residuales lógicos de situaciones como la persistencia del desempleo y la pobreza", explicó.