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El Focus sumó más potencia

Ford incorporó a la gama de su modelo mediano el naftero 2.0L Duratec de 145 caballos

Ford incorporó a su línea Focus una nueva opción de motorización. Se trata del naftero Duratec 2.0L 16V DOHC de 145 CV que ya se conociera en el Mondeo y la versión top de la Ecosport. Presentado en modelos equipados con transmisión manual y automática, el menor peso del nuevo motor es clave en el aumento de prestaciones y el alto rendimiento, y es además el resultado de su construcción íntegramente en aluminio.

Desde Ford explicaron que el Duratec 2.0L tiene un bloque de cilindros de fundición de aleación de aluminio de alto grado, con moldeado de precisión de arena por gravedad y con camisas de cilindro de acero, fundidas directamente en el bloque. La construcción del bloque presenta falda profunda y una bancada de aluminio. Una estructura en aleación de aluminio en forma de escalera entre block y cárter, que soporta los apoyos del cigüeñal, se acopla al bloque para conseguir una rigidez óptima, y un cárter de aceite con nervaduras complementa la rigidez del Duratec 2.0L, contribuyendo a un funcionamiento silencioso. El cigüeñal de acero fundido nodular requiere cuatro contrapesos, lo que optimiza el ahorro de peso.

Las bielas forjadas por sinterizado con cabeza en dos piezas, para un montaje de precisión, están acopladas a pistones de aleación ligeros revestidos. La altura de la cabeza del pistón está situada 4,5 mm por encima del segmento superior, lo que reduce las emisiones, según reportaron los ingenieros de la marca del óvalo azul. Los tres segmentos están ajustados para un funcionamiento sin fricciones. La construcción de la tapa de cilindros es de aleación de sílice y aluminio, tratado térmicamente después del proceso de fundido para una larga vida útil y resistencia.

El motor se coloca en el Focus mediante un sistema de eje de torsión de par (TRA) de tres apoyos. Este sistema consta de dos anclajes en el motor que soportan carga a lo largo de su eje de rotación, uno de los cuales incorpora un elemento amortiguador hidráulico para reducir los movimientos del motor en caminos bacheados y reducir las vibraciones en la transmisión. Un tercer elemento une la caja de transmisión con el subchasis, proporcionando una rígida resistencia al efecto de par. La clave del sistema TRA de separar las dos fuerzas primarias en el sistema de montaje del motor lleva a una reducción de las vibraciones.

La cadena de distribución no requiere mantenimiento durante la vida del motor. Tampoco lo requiere el juego de válvulas. Esto se ha conseguido a través de la reducción de fuerzas con la optimización del peso de elementos tales como las válvulas y las levas. El trabajo sobre el perfil de las levas evita fuerzas de contacto excesivas, y hay una selección óptima de la geometría y materiales de las piezas en movimiento y los anillos de los asientos de las válvulas.

De esta forma, la gama del Focus se compone de cuatro motores: junto al nuevo Duratec 2.0L nafta de 145 CV se encuentran el 1.6L Zetec Rocam de 103 CV (nafta/GNC) y los diesel 1.8L Lynx TDi de 90 CV y 1.8L Duratorq TDCi de 115 CV.