"Sé que hay cosas que no se perdonan"

El hincha rosarino es muy pasional. Y Olmos, recién llegado a la ciudad, ya empezó a palpar lo que significa, mueve y estimula el clásico de la ciudad: un Newell's-Central.

-¿En este contexto del que hablamos, qué cosas tuvo oportunidad de palpar en los hinchas respecto al clásico?

-Conozco, por lo que he leído anteriormente, lo dividida que puede estar la ciudad deportivamente. Sé que hay cosas que se perdonan y que hay cosas que tienen difícil perdón. Sé que es un partido tremendamente especial. He visto el compromiso, el anhelo y la necesidad de la gente de Newell's. Ellos te van metiendo en clima, estás en un restaurante y hay gente que se levanta, cruza el salón y te viene a saludar y a desearte suerte y te piden que le ganés a Central. Esas son cosas propias del fútbol argentino, pero eso no me provoca un mayor compromiso, me provoca un estímulo emocional que te va metiendo en clima.