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jueves,
02 de
junio de
2005 |
No pudieron dar un diagnóstico de Lino Bertuzzi
El mayor de los hermanos acusados por los casos del Loco de la Escopeta fue visto por psicólogos forenses
Los psiquiatras forenses que se entrevistaron con Lino Bertuzzi, uno de los hermanos sospechados de tener alguna vinculación con los casos del Loco de la Escopeta, no pudieron elaborar un diagnóstico preciso sobre su personalidad. Por eso le recomendarán al juez que investiga el ataque del lunes 23 de mayo que disponga una reunión para "seguir estudiando" al imputado. Esa fue la primera conclusión a la que arribaron los forenses Carlos Elías y Alberto Gagliardi luego de la junta médica realizada con el mayor de los hermanos en el subsuelo de los Tribunales provinciales. Ayer había ocurrido lo mismo con Alberto, o Pepo, quien a diferencia de su hermano presentó el martes último un diagnóstico más contundente o al menos más claro para los peritos.
Las dos entrevistas fueron ordenadas por el juez de Instrucción Nº10, Alfredo Ivaldi Artacho, quien intenta establecer si Pepo y Lino están en condiciones de entender la criminalidad de sus actos.
Lino y su hermano Alberto están detenidos desde el 23 de mayo acusados de ser los autores del atentado contra un ómnibus de la línea 107, sobre el viaducto Avellaneda y Humberto Primo. El coche recibió un escopetazo en una de sus ventanillas y, para la policía, el hecho tiene todos los condimentos como para vincularse a la seguidilla atribuida al francotirador.
Los Bertuzzi fueron arrestados luego de que algunos testigos coincidieran en la descripción del camión desde el que se efectuó el disparo. Ese dato coincidía con el Mercedes Benz 608 que los hermanos usaban para trabajar como fleteros. Además, cuando la policía allanó la casa de Zuviría al 7300 encontró cinco armas, entre las cuales había una escopeta 12.70, es decir del mismo tipo que los restos de munición encontrados en el lugar.
A ocho días de estar detenido, Lino llegó ayer a los Tribunales para reunirse con los psiquiatras forenses. El sospechoso estuvo alrededor de una hora con los profesionales y al término de la medida, Elías dijo: "No se dio por terminada la pericia. Es un caso difícil y lo vamos a seguir estudiando". De acuerdo al especialista, Lino "estuvo tranquilo" durante el encuentro, cuyo final "generó dudas como para trazar un diagnóstico".
"No llegamos a una conclusión determinante como lo requiere una pericia. Por eso creemos en la necesidad de realizar una nueva entrevista para dentro de unos días", manifestó el profesional. Elías sostuvo que la charla de ayer "no alcanzó" para probar que el acusado sea imputable o no. "Tiene una personalidad compleja que debe analizarse con otros encuentros".
El primer psicólogo que entrevistó a los hermanos fue Héctor Albornoz, de Medicina Forense de la policía provincial. Este profesional entrevió en Lino elementos psicopáticos y predominio sobre su hermano Lino. A Pepo le atribuyó un nivel de psicosis, secuencias delirantes en su discurso e incapacidad para distinguir lo real de lo fantástico.
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