"No pretendo renovar ni cambiar nada del tango"

Gerardo Gandini editó otro CD grabado en Rosario

El músico y compositor Gerardo Gandini editó un nuevo disco basado en una presentación en vivo en el teatro del Parque de España. Como en su anterior experiencia discográfica, "Postangos", que obtuvo el Grammy latino 2004, en su flamante álbum "Flores negras" Gandini vuelve a abordar un repertorio tanguero.

"Después del inesperado Grammy por «Postangos», se me ocurrió repetir la experiencia de grabar otra vez en vivo en Rosario para volver a tocar tango pero desde un concepto un poco más depurado", apuntó el pianista. "El pensamiento se volvió más complejamente simple", añadió a fin de explicar su nuevo álbum.

"Tras mi experiencia con (Astor) Piazzolla, en mi casa se me ocurrió ver qué pasaba si ese tipo de improvisación la probaba sobre tangos tradicionales pero desde el tango, desde las características que lo diferencian de otras músicas", afirmó Gandini sobre su nuevo proyecto.

Al desmenuzar esa praxis, el autor de las óperas "La casa sin sosiego" y "La ciudad ausente", especificó que trataba de improvisar evitando dos cosas: que se parezca a Piazzolla y que suene a jazz.

En un tránsito de una década por este lenguaje tanguero en solitario, el artista consiguió con "Flores negras" una síntesis que se expresa en "El choclo", "Mimí Pinsón", "Nunca tuvo novio", "La última curda", "Los pájaros perdidos", "Malena", "Milonga triste" y en dos piezas propias: "El día después de la lluvia" y "Mi desgracia".

"A mí se me ocurren algunas cosas porque no soy un pianista de tango normal, pero quiero dejar en claro que no pretendo renovar nada ni cambiar ni una coma. El tango está bien así como está", se apuró a aclarar.

Gandini, además, fue el encargado de arreglar las cuerdas que acompañan a su amigo Páez ("un tipo muy talentoso, un gran autor de canciones", lo definió) en el registro del inminente álbum "Moda y pueblo", que en breve iniciará un extenso recorrido por escenarios de la Argentina.

Finalmente, Gandini confió: "Antes pensaba que lo mío era la música culta contemporánea y que estas arreglos de cuerdas para Fito eran algo marginal. Me consideraba una especie de esquizofrénico. Hasta que un día tuve una especie de iluminación y me dije «es todo lo mismo. Puedo hacer estas cosas con el mismo gusto y todas me producen placer»".

El pianista porteño, que obtuvo un Grammy en 2004, regresa con "Flores negras".