¿Quiénes son los responsables?

El 30 de marzo pasado se realizó la asamblea general ordinaria de la Caja de Previsión Social de los Profesionales de la Ingeniería de la provincia de Santa Fe, Segunda Circunscripción, para tratar la memoria y balance del año 2004. En la misma se debió reflejar la desaparición de los dólares que en dos cajas de seguridad en el Banco Municipal estaban depositados. En una 375.000 y en otra 252.000. Esta última en custodia perteneciente al Fondo Nacional de Trasplantes. Con la presencia del directorio, la sesión se desarrolló dentro de un clima de tensión, donde los oradores se explayaron con diversas ponencias, algunas atildadas y criteriosas, otras disparatadas y confusas. Tal es así que se trató de imponer en el balance como pérdida y sin alternativas de recupero el dinero sustraído y además la no reintegración del monto en custodia del Fondo. Se intentó amedrentar a los asambleístas con el artilugio de que la no aprobación significaría un problema muy serio para la Caja. El sector opositor, quizás inspirados en las enseñanzas de Séneca, quien proclamara que la filosofía nos debe enseñar a hacer y proponer ideas perfectibles y razonables, se inclinó mediante votación nominal a la no aprobación del balance por 74 votos contra 31. Hoy a varios días de realizada la asamblea en un análisis frío de la misma podríamos extraer dos conclusiones importantes: en primer lugar, destacar el denodado esfuerzo e interés indescriptible en la aprobación del balance por parte del grupo de seguidores de quien se constituye en la actualidad en uno de los principales sospechosos del ilícito cometido, resultando llamativo a su vez que algunos de los mismos sean candidatos en una de las listas preelectorales para acompañar a la mitad del directorio actual. Y por último, que a más de 6 meses del grave hecho consumado, aún la Justicia no se ha expedido sobre cuál o cuáles fueron los responsables. Claro está que moralmente muchos deberían sentirse culpables por la confianza ciega que durante muchos años dispensaron.

Arquitecto Osvaldo R. Arino,

DNI 6.005.967