Mirás dijo que no se acatan la Constitución ni las leyes

El arzobispo de Rosario y presidente de la Comisión Episcopal Argentina, monseñor Eduardo Mirás, dijo hoy que "nos falta acatamiento a la autoridad legítima, a la Constitución y a las leyes. Y en la sociedad no hay posible libertad auténtica sin autoridad y sin normas que enmarquen su ejercicio y la orienten hacia su fin".

Durante el tedéum celebrado en la catedral por el 195º aniversario de la Revolución de Mayo, Mirás dijo que "nos falta acatamiento a la autoridad legítima, a la Constitución y a las leyes. Y en la sociedad no hay posible libertad auténtica sin autoridad y sin normas que enmarquen su ejercicio y la orienten hacia su fin. De lo contrario, llamar a la libertad sería convocar a la anarquía. Queremos una Patria grande pero la empequeñecemos con las miserias de nuestro obrar cotidiano, egoísta y falto de solidaridad".

Mirás aseguró también que "en estos momentos la cultura anuncia concepciones de la libertad que no se compadecen con su grandeza y motivan a creer que es libre el que hace lo que quiere, confundiendo con el libertinaje a la cualidad más digna de la naturaleza humana".

"Lamentablemente estamos olvidando el sentido de la historia _señaló el titular de la Comisión Episcopal en la catedral-. La vida social se desarrolla a merced de la cultura de lo fácil, de lo cómodo, del capricho consumista que despersonaliza y que acaba en la frustración y en la desesperanza del individualismo y de la ausencia de la solidaridad".

Mirás resaltó las bondades de exteriorizar el amor por la patria aunque dijo que más importante era "demostrarlo en el trabajo cotidiano, en el empeño de construir un país fraterno, donde toda relación humana tenga como fundamento la justicia y la concordia".

"La patria -prosiguió-, como la familia, es una sociedad natural. Por eso no admite ser absorbida por estructuras políticas supranacionales ni por el dominio de otras naciones más grandes o más poderosas. Sin embargo, es imposible su existencia y su desarrollo sin auténtica libertad".

Previo a la ceremonia religiosa, el intendente Miguel Lifschitz presidió los actos centrales por la celebración dle 195º aniversario de la Revolución de Mayo.

Los actos se realizaron en la plaza 25 de Mayo y desde allí los asistentes se trasladaron a la catedral, donde se ofició el tedéum.

Monseñor Mirás presidió el tedéum en la catedral.