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domingo,
17 de
abril de
2005 |
Continúan en grave estado los hinchas baleados en Córdoba
Cordóba.- Los dos hinchas de Talleres de Córdoba baleados ayer al finalizar el clásico con Belgrano continuaban esta mañana en estado "muy delicado".
Un tercer hincha del club de barrio Jardín -que ayer jugó con su tradicional rival por la B Nacional- resultó muerto de un balazo en el tórax en esos mismos disturbios, cuando se enfrentaron dos grupos de las barras brava de Talleres, en el Puente 15 del barrio de Chateau Carreras, a unos cien metros del estadio.
La víctima fatal fue identificada como Jorge Castro, de 19 años, domiciliado en Villa Libertad, quién iba acompañado por su novia Ramona Peñaloza, cuando recibió el disparo mortal.
La mujer lo hizo trasladar primero a la comisaría 14, cercana al lugar, y desde allí al Hospital Municipal de Urgencias, donde a minutos de ingresar falleció.
En el enfrentamiento de "La Fiel" y "Las Violetas", los grupos antagónicos que mantienen sus diferencias desde hace más de seis años por prebendas de directivos y jugadores del equipo albiazul, resultaron además gravemente heridos Sergio Kowalewsky, de 20 años, y Marcelo Castillo, de 37.
Este último iba acompañado por su hijo, un menor de 13 años, que también resultó herido, pero de menor gravedad, a tal punto que esta mañana fue dado de alta en el Hospital de Niños, donde se encontraba internado desde ayer.
Kowalewsky y Castillo presentan tres balazos cada uno en sus cuerpos, todos de calibre 22, al igual que el disparo mortal que recibió Castro.
Si bien hasta este mediodía no se conocía aún un parte oficial del Hospital de Urgencias, médicos del centro asistencial precisaron que el estado de ambos "es muy delicado", señalando que habían sido intervenidos quirúrgicamente para extraerle las balas.
La violenta rivalidad entre ambas barras brava obligaron a los fideicomisarios que manejan Talleres a separar a ambas hinchadas, a través de lo se denomina un "pulmón", en la tribuna norte del Estadio Córdoba, donde se ubican los simpatizantes del club de barrio Jardín.
La medida fue tomada al inicio del actual torneo, pero hacía dos fechas que la prevención había sido levantada, a partir de una aparente "tregua" pactada entre ambas barras brava. (DyN)
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