La Municipalidad insiste en endurecer las multas a los bolicheros

La Municipalidad de Rosario intenta endurecer las sanciones a los locales nocturnos que no cumplen con los requisitos para funcionar, y para ello envió un mensaje al Concejo Muncipal para que en la sesión de mañana los ediles traten algunas modificaciones a la norma, para elevar las sanciones de 1.000 a 5.000 pesos, y de reiterarse los incumplimientos, el cierre definitivo del local.

En esas modificaciones a la norma que regula la actividad trabajó la concejala Patricia Lagarrigue (PS). "Recibimos un mensaje del intendente para modificar la norma e incorporar figuras que no estaban previstas, como multas de 1.000 a 5.000 en el caso de exceso en el factor ocupacional y clausura del local de 20 a 90 días. Serán consideradas faltas graves la presencia de menores en lugares prohibidos, el incumplimiento en las condiciones de la salidas de emergencias o que no estén operables y la normas que prohiben la venta de alcohol a menores, y en caso de reincidencia, se dispondrá la caducidad de la habilitación", explicó la edil.

De acuerdo a la ley orgánica de municipalidades se estipula que el máximo para las faltas de este rubro es de poco menos de mil pesos y la Municipalidad intenta modificar este puntos para sancionar a los propietarios que incumplan con la norma.

Tanto el Ejecutivo como los concejales de distinto signo político admiten que ese monto es bajo y que por lo tanto no tiene valor sancionatorio ya que les permite a los empresarios infringir las normas una y otra vez.

Por su parte, el independiente Gustavo Gerosa fue el autor de una normativa para que caduquen las habilitaciones de los bolicheros cuando se los clausuraba dos veces por la misma causa.

Para el propio presidente del Concejo, Agustín Rossi, afirmó que a partir del proyecto de Gerosa los empresarios de la noche se arriesgan directamente al cierre del negocio, sin embargo reconoció que "si tienen que pagar mil pesos, efectivamente al comerciante le conviene cometer la infracción". Pero Rossi se inclinó por la postura de Gandolla de no discutir ahora el mensaje del Ejecutivo.