Buenas pilchas y un arma para llevarse 19 mil pesos

Tres hombres redujeron a las dos empleadas de una empresa corredora de cereales de Máximo Paz

Villa Constitución.- Tres sujetos esgrimiendo un arma de fuego redujeron a dos empleadas de una empresa dedicada al corretaje de cereales y se alzaron con 19 mil pesos en efectivo que había en una caja fuerte. El hecho ocurrió ayer por la mañana en la localidad de Máximo Paz (departamento Villa Constitución), a unos 70 kilómetros al sudoeste de Rosario, y la policía investiga las "extrañas" características del suceso.

En rigor, el supuesto negocio de corretaje de cereales que sería de Eduardo Luis Baiocchi, domiciliado en Rosario, fue dado de baja de la actividad comercial el año pasado. De todos modos, en la actualidad es atendido -a puertas cerradas- por una empleada administrativa.

A las 9 de ayer, cuando la empleada, identificada como Araceli Grimaldi, de 37 años, llegó a trabajar, se encontró con que la esperaban tres sujetos jóvenes, "muy bien vestidos y con zapatos brillosos", según le dijo después a la policía. Uno de ellos le apuntó con un revólver "plateado" y la obligó a ingresar al local. Un rato después, la mujer que hace la limpieza del comercio, Francisca Miño, de 44 años, corrió la misma suerte que su compañera, y ambas terminaron encerradas en el baño.

Después, con el camino allanado y sin ejercer violencia, los maleantes abrieron la caja fuerte con una llave que le sacaron a Grimaldi, levantaron los 19 mil pesos en efectivo y se esfumaron.

Lindero al local de la corredora de cereales hay un bar y a la hora del robo varios parroquianos ocupaban sus mesas. Sin embargo, ninguno de ellos pudo aportar datos sobre el hecho a la policía. "La gente que estaba en el bar no vio movimientos extraños ni automóviles cerca del lugar", deslizaron los investigadores.

De todos modos, hasta anoche la policía ignoraba qué tipo de comercio se desarrollaba en el lugar, habida cuenta de que el negocio de corretaje de cereales fue dado de baja hace alrededor de un año y Baiocchi no era visto con frecuencia en el local.