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 miércoles, 06 de abril de 2005  
Tres vidas en ruinas al final del encierro
Eran inocentes y pasaron cuatro años presos por un doble crimen. Fueron vejados y responsabilizaron al fiscal

Buenos Aires.- Tres hombres absueltos anteayer luego de permanecer presos entre tres y más de cuatro años por un doble asesinato registrado en el conurbano bonaerense, que no cometieron, aseguraron que fueron vejados en la cárcel, que no pudieron disfrutar de sus familias y uno de ellos dijo que le frustraron el sueño de viajar a Miami para poner una pizzería.

Claudio Luna y los hermanos Roger y Matías Acuña relataron que con las detenciones que sufrieron, les arruinaron la vida y acusaron a la policía, a un fiscal y un juez de La Matanza de haberles armado la causa en su contra. Luna contó que al momento de ser detenido tenía dos trabajos, en un taller de bordado por la mañana y como pizzero por la tarde, y añoraba con viajar a EEUU para instalar un negocio de ese rubro.

"Estas circunstancias rompieron todos mis proyectos, todos mis sueños, toda mi vida. Me arruinaron la vida", agregó. "Ahora, junto a un amigo, tenemos que esperar para poder volver a salir del país, después de estar presos", señaló el hombre que estuvo detenido en tres penales sin pruebas en su contra.

Luna afirmó que en la cárcel sufrió toda clase de vejámenes. "Todas las cosas que se puedan imaginar, las mismas que sufre cualquier preso", dijo sin querer dar detalles.

Roger Acuña, de 29 años, fue detenido en Santiago del Estero, de allí lo trasladaron y alojaron en la comisaría de Ramos Mejía, luego lo llevaron a la cárcel de Olmos, después a las unidades 24 y 31 de Florencio Varela. Dos semanas antes del juicio fue trasladado a la unidad 13 de Junín y por último lo destinaron a La Plata. Aseguró que "la policía armó esta causa" y que lo hizo en complicidad con el fiscal de La Matanza Claudio Polero.

Su hermano, Matías Acuña, consideró que la Justicia "tardó mucho tiempo" en darles la razón y se quejó al afirmar: "Durante mucho tiempo no nos dieron pelota". Matías estuvo preso en las unidades 24 y 32 hasta que hace un año la madre consiguió que lo trasladaran a la unidad 31 de Florencio Varela, donde estaba detenido su hermano Roger.

Matías Acuña y Claudio Luna estuvieron presos cuatro años y cuatro meses, en tanto los otros dos absueltos, Roger Acuña y Carlos Varela, pasaron tres años y ocho meses encerrados.

Los cuatro fueron absueltos por el Tribunal Oral Criminal 1 de La Matanza al término de un juicio que se les siguió por el crimen de María Rosa Jiménez y Gustavo Sanagua, ocurrido el 21 de noviembre de 2000. El fiscal de juicio de La Matanza Eduardo Campanella no los acusó al considerar que no había pruebas contra ellos. Varela seguirá preso por tener un proceso por robo.

El de ayer fue el tercer cuestionamiento en menos de un mes que recibe el fiscal Polero por parte del mismo tribunal oral. Había recibido críticas tras un juicio oral realizado el 15 de marzo pasado en el que fue absuelto también por falta de pruebas un hombre que estuvo preso durante cinco años acusado por el crimen del dueño de un supermercado de la localidad bonaerense de González Catán. Tres días después, el Tribunal Oral 1 de La Matanza también cuestionó al fiscal tras un juicio oral por el presunto intento de secuestro de las hijas de Catherine Fulop y de Osvaldo Sabatini, en el que fueron absueltos un hombre y una mujer que pasaron más de un año en prisión. (Télam)
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Claudio Luna, uno de los liberados.


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