| miércoles, 06 de abril de 2005 | Conductor demorado por el accidente de una joven Iba en moto y fue embestida en Pellegrini al 4500. La rozó un automovilista que, en apariencia, no lo advirtió Una joven motociclista fue embestida ayer a la mañana en la zona oeste de la ciudad por un automovilista que se alejó del lugar sin brindarle asistencia. Las personas que se arremolinaron en torno de la mujer aseguraban que el causante del accidente había abandonado a la joven tras impactarla. Pero la declaración posterior del conductor, localizado por la tarde por la policía, deja al menos dudas acerca de su responsabilidad. Anoche la muchacha estaba internada en el Hospital de Emergencias mientras que el conductor, que estuvo durante un lapso demorado en una comisaría, ya había sido excarcelado.
Según indicó una fuente policial, el accidente se produjo cerca de las 11. A esa hora, Pablo M., de 26 años, transitaba en un Fiat Siena por avenida Pellegrini al 4500 en dirección al este. Detrás del conductor lo hacía Gladys Soledad Verón, de 23 años, en una moto Honda Dax de color roja. La colisión se produjo cuando la motociclista, según el vocero consultado, "se puso a la par del Fiat y lo rozó con el manubrio" (de la Honda Dax).
La moto derrapó unos metros, la chica cayó y golpeó su cabeza contra el pavimento mientras que el conductor continuó la marcha. Una cuadra después se detuvo frente a un semáforo. Allí, según el portavoz consultado, otro automovilista le contó que había ocurrido un accidente. Entonces, de acuerdo a su relato en la comisaría 6ª, regresó a la escena del siniestro. "Le dijeron que quien había chocado a la chica era, en realidad, el conductor de una camioneta. Entonces se fue", explicó la fuente policial.
La chica fue trasladada al Clemente Alvarez, adonde llegó con un traumatismo de cráneo y golpes. Anoche estaba internada en observación.
Datos precisos Tras el accidente, los pesquisas contaron con tres datos precisos: la marca, el color del auto y el número de patente. La información había sido brindada por un testigo a la policía, quien dijo que el auto era un Fiat Siena blanco y el dominio CYU155. Con esos datos, efectivos del Comando Radioeléctrico acudieron al domicilio del automovilista: una casa situada en Cullen al 2100.
Allí, los uniformados se contactaron con la madre de Pablo M. La mujer les dijo que su hijo había ido a un taller de Virasoro al 3000 para instalar un reloj en el vehículo porque planeaba pedir la licencia como taxista.
Un rato después, Pablo M. llegó a la casa y fue detenido. Anoche ya había recuperado la libertad por disposición de la jueza correccional Graciela Sedda después de prestar declaración en la comisaría 6ª. enviar nota por e-mail | | |