| miércoles, 06 de abril de 2005 | Ejercicios de guerra. Ofensiva de la Casa Blanca sobre la polémica norma antiterrorista Patrict Act Mas de diez mil personas participan en los simulacros de atentados en EEUU La maniobra de prevención incluye falsos ataques biológicos y químicos, además del tratamiento de heridos Nueva Jersey, EEUU. - El mayor simulacro de un ataque terrorista efectuado en EEUU se concentró ayer en el tratamiento de heridos: falsas víctimas fueron llevadas a hospitales tras la simulación de un ataque biológico en Nueva Jersey y una fingida explosión de armas químicas en Connecticut. Más de 10.000 personas, entre ellas representantes de Canadá y Gran Bretaña, participan en este simulacro de cinco días en los Estados norteamericanos de Connecticut, Nueva Jersey y en la capital, Washington, según el Departamento de Seguridad Nacional.
Cuatro grandes carpas inflables de descontaminación fueron erigidas en el estacionamiento del hospital Union para tratar a docenas de «pacientes» que habían llegado a las 9 de la mañana procedentes de un sitio de Nueva Jersey donde se simuló un ataque con un arma biológica causante de neumonía.
Médicos, enfermeras y los voluntarios que se hicieron pasar por víctimas tenían puestas mascarillas blancas. Cada paciente recibió un rótulo coloreado que le fue puesto en uno de los dedos del pie para mostrar la gravedad de la condición. Cinco de los 64 pacientes recibieron rótulos negros, indicando que habían «fallecido».
Entre tanto, en New London, Connecticut, cuadrillas de rescate y perros rastreadores buscaron entre la basura que simulaba un edificio parcialmente derrumbado, tratando de hallar a «víctimas» causadas por un fingido ataque con gas mostaza.
Los puntos débiles El ejercicio, de una semana de duración y a un costo de 16 millones de dólares, trata de determinar los puntos débiles en la planificación de medidas de emergencia en EEUU. En el ejercicio antiterrorista de hace dos años en Seattle y Chicago, el Departamento de Seguridad Nacional constató, entre otros, graves problemas de coordinación entre las fuerzas implicadas.
El simulacro comenzó el lunes en Nueva Jersey en un campus de la universidad Kean, con el simulacro de una investigación de un vehículo que, según la actuación, se sospechaba estaba diseminando una bacteria letal desde una manguera que sobresalía de una de sus ventanillas traseras.
En New London, Connecticut, fueron volcados autobuses y voluntarios que hacían el papel de víctimas lucían truculentos maquillajes que simulaban llagas y sangrientas heridas.
Aunque no fueron utilizadas armas ni agentes biológicos verdaderos, las autoridades locales y estatales respondieron como si fueran verdaderos, enviando ambulancias a los hospitales y saturando el área de investigadores y unidades de emergencia.
Los simulacros son supervisados por funcionarios del Departamento de Seguridad Interior federal desde un centro de mando en Washington, así como desde los centros regionales en Nueva Jersey y Connecticut. "Deseo aclarar que empujaremos hasta el límite nuestros planes y nuestros sistemas", dijo el secretario de Seguridad Interior, Michael Chertoff.
De acuerdo con Chertoff, el entrenamiento se basa en la unión de amenazas terroristas del pasado y estimaciones sobre la posible magnitud de atentados. Entre otros, se probará la interactuación entre 27 instituciones gubernamentales en un caso de ataques.
Polémica ley En tanto, la Casa Blanca inició ayer su ofensiva para que el Congreso estadounidense renueve polémicos artículos de la Patriot Act, la ley antiterrorista aprobada poco después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 y que restringe en varios aspectos las libertades públicas. Durante la audiencia parlamentaria con la que ayer comenzó la discusión, y durante la cual hablaron el ministro de Justicia, Alberto Gonzales, y el director del FBI, Robert Mueller, algunos legisladores pidieron, como se preveía, mayores controles en la frontera de EEUU con México.
La Patriot Act, que amplió largamente los poderes de vigilancia del gobierno y facilitó el procesamiento de sospechosos de terrorismo, tiene 15 artículos polémicos que no son permanentes y vencen en diciembre. La norma más controvertida que vence a fin de año, si no es renovada, es «la biblioteca», que permite a la Justicia requisar "libros, documentos y otros artículos en lugares de trabajo, hospitales y otros lugares".
La Patriot Act ha recibido fuertes críticas por considerarse que ha llevado a abusos por parte de las autoridades. enviar nota por e-mail | | Fotos | | En Nueva Jersey se simuló un ataque con un agente biológico. | | |