| domingo, 03 de abril de 2005 | El viaje del lector: La isla Esmeralda Irlanda fue elegida como el mejor lugar para vivir. Historia, deportes y toda la magia de un país único Pasaron cuatro años de este viaje que marcó mi vida. Subí al avión que me llevó a Irlanda a mediados de julio y estuve hasta principios de agosto. El objetivo principal fue mejorar mi inglés y conocer otra cultura, pero esta experiencia fue tan enriquecedora que, entre otras cosas, me hizo valorar el enorme cariño que tiene mi familia por mí, ya que hacen todo lo posible por darme la oportunidad de conocer otros lugares del mundo.
Mi estadía fue en las afueras de Dublín, capital de Irlanda. Allí conviví durante 23 días en casa de una pequeña y muy amigable familia, los Kelly, quienes me ayudaron mucho y me cuidaron como un hijo más. Mis estudios fueron en la escuela Moyle Park College.
Fue entonces que conocí la maravillosa Isla Esmeralda que ofrece las mil y una maneras de disfrutar de un paisaje caracterizado por el verdor y una limpieza impecable, elementos que son el marco de un país "de otro mundo". Cierta magia sobrevuela cada rincón de este paraíso verde y hasta parece que los duendes y gnomos acompañan en las distintas actividades.
Entre las cosas que hice quiero destacar mi recorrido por las islas Aran. El paso anterior es la parada en Galway, un pueblito portuario que tiene algo mágico, caracterizado por irregulares peatonales y la homogeneidad de las casitas y negocios que respetan y tratan de mantener intacta la estructura original. En este rincón de Irlanda se puede apreciar la catedral, que es una muestra de arquitectura mastodóntica que se impone por sobre los techos de las casas.
El viaje hacia las islas se realiza únicamente vía avión y ferris, y el tiempo de duración es de aproximadamente 45 minutos a 1 hora.
El paisaje de la bahía es espectacular: hay pequeñas islas de piedra rodeadas por el celeste del agua que no da muestras de contaminación alguna. Una vez que uno desembarca en Aran innumerables filas de traffics están listas para llevar a los pasajeros. La isla principal es Inis Mór. Allí nos dejaron en la entrada de un camino de tierra el cual sólo es accesible a pie o en bicicleta. Al finalizar este camino, se encuentran estructuras de piedra y los mencionados acantilados que son imperdibles.
Otras atracciones Ya en el centro de Dublín si uno llega en temporada, se puede disfrutar un partido de Hurling, presidido por la GAA (Gaelic Athletic Association), que es un deporte típico de la Isla Esmeralda. Se juega con arcos parecidos a los de fútbol americano pero con un arquero en la parte inferior que defiende de los tiros rivales que se efectúan con una especie de palo de hockey aunque la pelota es llevada en el aire. Es un deporte muy excitante tal vez por lo riesgoso y de gran popularidad en el país.
También visité dos lugares realmente interesantes, el primero, fue Trinity College, la universidad de Dublín, en donde se encuentra la biblioteca que contiene uno de los libros más antiguos de la humanidad: "The Book of the Kells". Esa biblioteca se hunde un centímetro por año, debido a que los arquitectos que construyeron el edificio no contemplaron el inmenso peso de los libros que en un futuro albergaría.
El otro sitio que visité fue la cárcel de Kilmainham Gaol, que fue una de las más severas de su tiempo. Se incendió y fue reconstruida por los vecinos del barrio y actualmente forma parte del patrimonio nacional de Irlanda.
Jardines, castillos imponentes con miles de años de historia, waterfalls, museos, acantilados (Aran Islands, unos de los más altos del mundo), y bien vale recordar esos pubs característicos que marcan la influencia londinense del "after office". El Temple Bar es un ejemplo claro.
Eire (Irlanda en gaélico, el idioma nativo) es un lugar único en el mundo que tiene un montón de secretos y actividades para ofrecer. Por algo el año pasado esta tierra de antiguos guerreros fue elegida como el mejor lugar del mundo para vivir. Me llevo en el corazón especialmente su hospitalidad de primera clase y el sabor de haber conocido un lugar con un pasado tan rico que por donde uno lo mire desborda cultura.
Germán Muzzio enviar nota por e-mail | | Fotos | | La catedral de Galway está ubicada en un encantador pueblito portuario. | | |