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 domingo, 03 de abril de 2005  
A 23 años del desembarco, el presidente ratificó la soberanía sobre Malvinas
"Las islas volverán a ser argentinas por el diálogo"
Kirchner destacó la voluntad del gobierno de otorgar un reconocimiento "paulatino" a los ex combatientes

El presidente Néstor Kirchner confió ayer en que las islas Malvinas "volverán a ser argentinas por el diálogo" y ratificó la voluntad de su gobierno de otorgar a los ex combatientes un "reconocimiento paulatino" para sacarlos del "olvido al que fueron sometidos durante tantos años".

"Nuestro compromiso no es una promesa hipócrita sino trabajar cotidianamente" para reivindicar a quienes "fueron a dar todo a Malvinas y no pidieron nada", destacó Kirchner al cumplirse 23 años de la guerra que se desató con Gran Bretaña por las islas del Atlántico Sur.

El jefe del Estado encabezó el acto conmemorativo en el Regimiento de Infantería Patricios, ubicado en el barrio porteño de Palermo, en medio del malestar expresado recientemente por sectores de ex combatientes a raíz de la falta de respuesta oficial a sus reclamos.

"El gobierno, paso a paso, en la medida de las posibilidades, pero con una firme decisión, seguirá trabajando junto a quienes combatieron en Malvinas para terminar con el olvido al que fueron sometidos durante tantos años", resaltó el presidente.

Aunque no hubo anuncios concretos como algunos esperaban, Kirchner recibió el apoyo de los veteranos, pese al temor oficial de que se utilizara este escenario para protestar por las reivindicaciones económicas que piden desde hace tiempo.

Ese temor llevó a las autoridades a suspender el acto que en principio se iba a realizar en Monte Caseros (Corrientes), optándose por un lugar donde fue más fácil controlar el ingreso: la plaza de armas de Patricios.

Flanqueado por el ministro de Defensa, José Pampuro, y el jefe del Estado Mayor Conjunto, brigadier Jorge Chevallier, Kirchner leyó los párrafos de la Constitución que ratifican la "legítima soberanía argentina" sobre las Malvinas.

"El gobierno confía en que las Malvinas volverán a ser argentinas por el diálogo y la paz, y trabajará para lograrlo con la firmeza de los que no renuncian a sus valores, ideas y principios", puntualizó.

El presidente, además, distinguió entre el "gesto imprudente e irracional de una dictadura militar en retirada, que intentaba retener el poder de cualquier modo," y el valor de los soldados que desembarcaron en Malvinas aquel 2 de abril de 1982.

Kirchner se preocupó en aclarar que su gestión inició "un punto de inflexión en las reivindicaciones" a los veteranos de la guerra (a quienes llamó "héroes") mediante la aplicación de "medidas concretas" tendientes a "mejorar la vida de los ex combatientes".

Aunque insistió en cuestionar la dictadura que impulsó la guerra, calificó la gesta de Malvinas como "una de las causas nacionales cuyos valores debemos rescatar para avanzar con la frente alta hacia la soberanía argentina".

"En estos 23 años vimos cuánta ingratitud se les ha prodigado" a los veteranos de guerra, indicó el jefe del Estado, quien reiteró que se está "poniendo las cosas en su lugar" para recompensarlos.

Durante el acto, del que también participaron el vicepresidente Daniel Scioli y los ministros de Interior, Aníbal Fernández; de Trabajo, Carlos Tomada, y de Planificación, Julio De Vido, entre otros funcionarios, Kirchner y Pampuro colocaron una ofrenda floral por los caídos en la guerra.

Antes del discurso presidencial, dirigió un mensaje Chevallier, quien señaló que "renovamos el reconocimiento sincero a cada uno de los ex combatientes, dejando atrás el olvido o la indiferencia sufrida".

Paralelamente, Scioli, el canciller Rafael Bielsa y el ex jefe del Ejército y actual embajador en Colombia, Martín Balza, se sumaron a los llamados a la población para reivindicar a los caídos y veteranos de Malvinas, a la vez que ratificaron la soberanía argentina sobre las islas.

Bielsa cuestionó el "unilateralismo" británico para afirmar su presencia en el Atlántico Sur, aunque advirtió que continuará la política de "paciencia infinita" en pos de la recuperación de la soberanía sobre el archipiélago.

Balza lanzó un duro cuestionamiento a la Junta Militar encabezada por Leopoldo Galtieri: "Utilizaron una causa noble para fines bastardos, porque el objetivo era prorrogar la dictadura".

En Rosario, el intendente Miguel Lifschitz encabezó los actos oficiales en el Monumento a la Bandera y en la plaza Gesta de Malvinas.
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El jefe de Estado encabezó el acto oficial.

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