Dos falsos policías simularon un operativo para robar en una casa

Dijeron que debían cumplir una medida judicial por un divorcio. Pero ataron a unapareja a la que sustrajeron dinero y tarjetas de crédito. Uno estaba uniformado

Una mujer de 41 años y su pareja fueron asaltados en su casa de la zona sudoeste por dos hombres que se identificaron como policías que llegaban al lugar para cumplir con un trámite judicial por un divorcio. Los ocupantes de la casa terminaron encerrados en un baño con las manos atadas y los delincuentes se llevaron alrededor de 300 pesos, teléfonos celulares, tarjetas de crédito, alhajas y documentación personal de la mujer como la escritura de la vivienda. Todo hace sospechar en principio que se trató de un robo "entregado" o de una venganza cuyos motivos, hasta anoche, eran ignorados.

El asalto se produjo poco antes de las 21 del viernes, en Dean Funes 8344. Allí viven Esther Gómez y su novio. El barrio es de casas humildes, pero de material y a esa altura la calle es un sendero de tierra ubicado a unos 200 metros al sur de al avenida Rivarola. Es casi en el límite entre Rosario y Pérez.

La mujer contó a regañadientes lo que le sucedió. "Es que tengo miedo", fue el argumento que utilizó para repasar en murmullos lo ocurrido sin siquiera abrir la puerta de calle. Antenoche Gómez y su pareja estaban en la casa cuando escucharon que alguien golpeaba la puerta. Cuando Esther se asomó por el postigo se encontró con dos hombres. Uno vestía ropa de civil, pero el otro llevaba uniforme de policía. "Dijeron que eran de la fuerza y que venían a hacer un estudio ambiental con una orden firmada por el juzgado de la 4ª (sic)", recordó.

Gómez aseguró haber visto una hoja con un encabezamiento que impresionaba como una orden judicial y por eso dejó pasar a los visitantes. Además, aseguró haber visto en manos de uno de los sujetos un croquis de su casa. En el diálogo con La Capital, la víctima a la vez admitió que mantiene un juicio por divorcio con su ex esposo y por tal motivo accedió a los hombres concretaran la medida, que presentaron como un examen ambiental.

"Apenas entraron, uno sacó un cuadernito y empezó a anotar baño, comedor. Hasta que me preguntó por el auto y por el maletín", rememoró.

El vehículo y el portafolios son dos cuestiones sensibles para Gómez. Ambas cosas, según contó, tienen que ver con un conflicto que mantiene hace un tiempo con una pareja a la que prefirió no identificar. "La cosa tal vez no venga por el lado de mi ex marido sino de otras personas que me las reservo", dijo escuetamente.

Así las cosas, los falsos policías dejaron atrás la farsa y desenfundaron pistolas 9 milímetros. "Esto es para vos. Si no hablás sos boleta y cantá la combinación del maletín", le anunciaron a Gómez, apuntándole con un arma a la cabeza. Según su versión, los hampones siempre dejaron claro que "la cosa" era con ella y dejaron en paz a su pareja, al que de todos modos vigilaban de cerca. La situación se agravó más cuando a Gómez y a su novio les ataron las manos con el cable de una plancha y los encerraron en el baño.

En adelante el dúo se dedicó a revolver toda la casa hasta que encontraron un maletín en el que, según Gómez, estaba la escritura de la vivienda y otros documentos como tarjetas de crédito. Después juntaron las alhajas de la mujer, unos 300 pesos en efectivo y huyeron. Según vecinos de la cuadra, los hombres se subieron a Volkswagen Gol gris que los pasó a buscar por la puerta y desaparecieron. El caso es investigado por la seccional 32ª.

La mujer contó cómo fue que le robaron la casa.