Rosario desconocida: Ausencias, aciertos y errores

José Mario Bonacci (*)

Ante la alarma por una posible pérdida patrimonial en bulevar Oroño es oportuno seguir indagando en ese eje urbano. Su desarrollo une el extremo sur de la ciudad en el encuentro con avenida de Circunvalación, se presenta con aires de barrio hasta llegar a bulevar 27 de Febrero, se introduce en el Parque Independencia del cual es eje motor, y de Montevideo al norte despliega sus galas para conformar un ambiente refinado a través de sus jardines centrales con puntos destinados a la contemplación y el descanso. La profusión de verjas metálicas que antaño formaban una línea transparente sin interrupción rica en detalles de alto diseño, con jardines semipúblicos y privados contenidos en la franja que llega hasta los muros frontales de las construcciones.

Enmarcando la calle, una variedad nutrida de especies vegetales, sombrean generosamente el andar del peatón. El clima contiene a las construcciones de alto valor que fueron conformándola en el tiempo y que muestran su realidad con orgullo, a la vez que hacen oír la alerta que prevenga pérdidas irreparables en el futuro como ha ocurrido con gran parte de su patrimonio. Es la voz de la memoria la que exige una actitud que proteja y conserve aquello que es parte componente de su cuerpo construido.

Durante la gestión del doctor Mario Trampetti como cónsul general de Italia en Rosario (entre 1998 y 2001), un denominado Grupo Editorial "Oroño" imprimió "El libro del boulevard Oroño - Historia de sus mansiones" supuestamente pensado en fascículos de excelente factura a todo color, iniciando su cometido con el edificio que hoy ocupa el Consulado en Montevideo y Oroño. Este primer número se realizó en homenaje al 52º aniversario de la República Italiana. Sin embargo no está integrado a las bibliotecas del Consulado, ni del Colegio Dante Alighieri, y otras instituciones italianas. Sería bueno lograr un contacto con el grupo editor, o con cualquier persona que posea el material aludido porque así se lograría fortalecer y enriquecer el espíritu de indagación en la razón y ser de esta valorizada arteria como patrimonio social colectivo.


Palacios Pinasco y Staffieri
Hace treinta años desaparecían los palacios Pinasco y Staffieri. Entre ambos conformaban una verdadera "puerta de entrada" hacia el centro en la intersección con Córdoba. El segundo dejó paso a un proyecto para la firma Olivetti realizado nada menos que por Clorindo Testa que no se construyó, y la pieza histórica se perdió para siempre y sin retorno . Interrogando a los habitantes de la zona muchos de ellos se han manifestado disconformes con la solución dada al edificio ubicado en la esquina sureste de Oroño y San Luis, por cuanto lo ven, según sus expresiones, como un "pegoteo" entre una casa antigua que se ha querido mantener y sobre la cual nace de manera directa un nuevo cuerpo de diez pisos de altura. Como ejemplos de la actitud a tomar en estos casos existen algunos interesantes de ser estudiados.

En pleno corazón de Manhatann, sobre la avenida Madison, los arquitectos argentinos Gandelsonas-Agrest desarrollaron el mismo problema, dejando la construcción antigua como verdadero basamento y haciendo nacer una torre en su exacto centro geométrico, precedida además por sus cuatro lados respecto de lo existente. La inserción y cambio formal se lee claramente en el hall de ingreso general en planta baja. Igual enseñanza brinda nuestro Monumento a la Bandera respecto de su torre principal y su entrega a un volumen mayor que une la visión del conjunto con el suelo. Sólo cambian proporciones y dimensiones, pero el problema es idéntico.

En la recuperación de la Casa de la Caridad en Barcelona, realizada por los españoles Piñón y Viaplana, el gran patio central e histórico de tres lados opacos y fuertes es completado con el cuarto lado en cristal transparente, reflejante y moderno, que se sublima en un verdadero espejo duplicador del espacio. Lo nuevo y lo viejo conforman un conjunto magistral y magnífico, donde cada edad se expresa con entera libertad sin producir inestabilidades estéticas o formales.


Oroño al 1400
La cuadra de Oroño al 1400 muestra por un lado su margen de números impares, donde con ayuda del arbolado se puede leer una altura estabilizada de las construcciones, dando un pequeño salto sólo al llegar a Estanislao Zeballos. En la vereda de enfrente, sobre los impares, toda la cuadra se veía hasta hace poco con una contundencia aún mayor en el sentido de mantener una altura uniforme que fortalezca y ordene su lectura formal. Prácticamente el único caso que persiste así en todo el recorrido del bulevar. Variadas en sus estilos, las antiguas casas del lugar que cuentan con setenta u ochenta años de edad, se hermanan con expresiones art-decó, racionalistas o más cercanas aún, sin perder el equilibrio visual general. Es más, se destaca una obra muy simple y descarnada en la esquina con Montevideo (suroeste) realizada en los primeros años sesenta por el técnico constructor Félix Decille, que se inserta con firmeza y buena forma solamente apelando al recurso de mantener la altura general con sus vecinas.

Desde hace un tiempo la cuadra se ha alterado con la aparición de un agregado a la vivienda en donde funciona la Escuela Municipal de Música (ex Museo de la Ciudad). Ante la necesidad de contar con un auditorium, se construyó hacia el frente y sobre el techo general. Por su altura supera visiblemente en mucho a la altura original de la construcción, realizado en chapa sin encontrar con su cubierta curva solución a su desconexión visual con el clima general del lugar. A esto, se suma el problema de acondicionar un auditorium de material liviano volcado sobre la calle, con el ruido general y contaminación auditiva del sitio. La lectura más inmediata hace pensar en un verdadero "chichón" urbano e invasivo. Idéntico problema debió resolverse en la vecina Casa del Foro, que medianera por medio necesitó contar con su auditorium y fue situado en el fondo del terreno con líneas modernas y absoluta coherencia respecto de la casa antigua preexistente. Así también está asegurada la eficiencia acústica de un lugar pensado para gozar de una conferencia, del teatro o de la música, con respeto hacia la historia del lugar.

El conjunto de razonamientos y actitudes adecuadas son las que pueden ayudar a preservar eficientemente el patrimonio que aún resplandece en nuestras calles. Se ha perdido mucho, y entonces es absolutamente indispensable recurrir a soluciones que ayuden a fortalecer el espíritu protector de nuestro patrimonio para que las pérdidas ya irremediables sean compensadas, si eso es aún posible, con nuevos hitos que merezcan ser considerados con alegría y placer...

Esto no consiste nada más que en el ejercicio de un amor irrefrenable por el lugar en que vivimos...

(*)Arquitecto

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Expresiones art-decó y racionalistas se hermanan en bulevar Oroño.