Don Torcuato resiste el cierre de su aeropuerto

La estación sería clausurada el 30 de septiembre. Movilización de la población, usuarios y sindicalistas

El cierre del Aeropuerto Internacional Roberto C. Laplace, de Don Torcuato, en el norte del Gran Buenos Aires, anunciado para el 30 de septiembre próximo, movilizó a la población local, usuarios y sindicalistas en defensa de un lugar que representa numerosas fuentes de trabajo.

Esta estación aérea de más de 60 años es la segunda en importancia en su género en el país, y su cierre constituirá un golpe para un pueblo que nació a partir de ella y de la cual aún depende en buena medida. En su interior está el único cajero automático que atiende a una vasta vecindad. La empresa Aircom, propietaria del aeropuerto, también apadrina a un par de escuelas y colabora en la atención de necesidades sociales en la zona.

En el marco de negociaciones y acciones que desarrollan los defensores de la permanencia de la estación aérea, vecinos y usuarios anunciaron que cortarán el tránsito en la autopista Panamericana en señal de protesta por la medida.

El cierre fue dispuesto a raíz de la crisis que atraviesa la aeronavegación argentina, tras una serie de dificultades económicas que ya alcanzaron a un nivel de pérdidas mensuales de entre 50.000 y 60.000 pesos, que en este mes llegaron a 90.000.

La desaparición de la empresa afectará a diferentes sectores de la comunidad de Don Torcuato, en especial a los centenares de personas que perderán sus trabajos.

Por esta razón, sindicalistas, empresarios del área y funcionarios comenzaron a reunirse en el Edificio Cóndor de la Fuerza Aérea. El último encuentro fue el 16 de febrero pasado y el próximo está previsto para el 31 de este mes.

Todos los consultados mostraron su preocupación por el cierre, salvo el brigadier Horacio Orefice, presidente del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna), quien no respondió los llamados para requerir sus puntos de vista al respecto. (Télam)

La crisis de la aeronavegación provoca desocupación.