El gasto público nacional subió casi 30% en febrero

Las cuentas del Estado nacional cerraron febrero con un superávit primario, previo pago de la deuda, de 1.389,9 millones de pesos, un 39% por encima de lo alcanzado en igual mes del año pasado. Con esta cifra el primer bimestre del año acumuló un superávit fiscal de 3.032,4 millones de pesos, lo que equivale a un incremento de 17,1% contra el mismo período de 2004, informó ayer la Secretaría de Hacienda de la Nación. El resultado favorable se alcanzó pese a que durante el mes de febrero los gastos del fisco treparon en más de 2.210 millones de pesos a 9.690,1 millones, lo que implicó un salto de casi 30 por ciento.

La expansión de los egresos se explica fundamentalmente por un aumento de transferencias al sector público que subió de 1.953,3 millones a 2.769 millones. De este monto 2.526 millones corresponden a recursos coparticipables, cifra que en 2004 había sido de 1.793 millones.

Entre otras cosas, también subieron los giros al Tesoro Nacional (723,4 millones contra 431 millones), a institutos de seguridad social (314 millones contra 256 millones) y al Pami (de 1,1 millones a 106,4 millones).

Por otra parte, los gastos de capital avanzaron de 277,5 millones a 630 millones. En lo que respecta a las remuneraciones del Estado se pasó de pagar 733,7 millones en febrero de 2004 a 815,5 en 2005, mientras que en bienes y servicios el cambio fue de 213,7 millones a 304,8 millones.

El mes pasado, los pagos de deuda crecieron de 1.025 millones de pesos a 1.206,4 millones. Desde Hacienda señalaron que los mayores gastos pudieron convalidarse debido a un importante crecimiento de los recursos. Los ingresos totales llegaron a 8.700,7 millones de pesos, un 29,2 por ciento por encima de los 6.730 millones de febrero de 2004. Mientra que los ingresos corrientes fueron de 8.678,5 millones, de los cuales 6.845,6 millones corresponden a ingresos tributarios.

La solidez en materia fiscal es una de las metas que se propuso el ministro de Economía, Roberto Lavagna, quien al presentar el resultado del canje de deuda advirtió que la Argentina debe ser un país con "superávit fiscal permanente" para de esta forma poder hacer frente a sus compromisos.

El nivel de ahorro fiscal es uno de los puntos más conflictivos en la relación entre la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI). El organismo pretende que el gobierno argentino se comprometa a lograr un superávit superior al 3 por ciento del PBI lo cual es rechazado por la administración de Néstor Kirchner.

Para el 2005 se proyectó, y se acordó con el Fondo Monetario Internacional, que el superávit fiscal primario del Estado nacional, sin pago de intereses financieros, deberá rondar los 14.200 millones de pesos.

El año pasado, con una pauta de superávit comprometida con el FMI por 10.000 millones de pesos, se cerró el año con 17.360 millones de ganancia.