| domingo, 20 de marzo de 2005 | De mal en peor Tiro perdió 2 a 0 con Racing y se aleja de la pelea Elbio Evangeliste / La Capital Córdoba, enviado especial.- Cuando la mano viene cambiada no hay con qué darle. Por eso Tiro Federal anda a los tumbos. Porque tras cuatro empates consecutivos que lo alejaron bastante de la punta, anoche pudo haber robado al menos un punto y finalmente se quedó con las manos vacías. Claro que todo tiene explicación, y la que mejor grafica la situación fue la apenas aceptable actuación del equipo tirolense en el 0-2 ante Racing de Córdoba. Esto, como consecuencia de no haber podido aguantar el nivel de juego de los primeros 15 minutos.
Ese lapso de partido fue quizás de lo mejor que mostró el equipo del Chaucha Bianco en el torneo. Pero no alcanzó. Porque con el correr de los minutos la puesta en escena fue mermando y así la posibilidad de sumar de a tres fue inexorablemente hacia un camino utópico.
Claro que otra pudo haber sido la historia si al Negro Ramírez no le hubiese temblado el pulso para patear al arco en dos mano a mano claritos en lugar de buscar asistir a alguno de sus compañeros. Pero como lo hizo, Tiro desperdició la posibilidad de ponerse en ventaja jugando en un buen nivel. Con un Chueco García que se las ingeniaba para desestabilizar una defensa cordobesa que se vio desbordada por el planteo táctico del Chaucha Bianco, quien volvió a apostar por el viejo sistema de cuatro volantes, un mediapunta (García) y un solo punta (Ramírez).
Pero la primavera del buen juego fue efímera y por eso las cosas rápidamente se equipararon. Es que cuando Racing ajustó las marcas, el Chueco ya no tuvo tanta libertad y encima Romano, que, entre otras cosas, falló en un par de definiciones, no gozó de uno de sus mejores días.
De la Academia hubo algo, pero muy poquito, nada que preocupara en demasía. Sin embargo tras el retorno de los vestuarios fueron los cordobeses los que empezaron a escribir su parte. Y si no hubiera sido por la oportuna intervención de Abrigo para tapar sobre la línea un remate de Gigena y por una respuesta bárbara de Del Vecchio ante la entrada solitaria de Guaymas tal vez el resultado hubiera quedado sellado, aunque injustamente, antes de lo debido.
Todos los pelotazos que envió Racing no terminaron de complicar a un Tiro que no era ni por asomo el mismo equipo del inicio del partido. No la pasaba tan mal. Tampoco podía quejarse de que no estaba ganando. Así, el punto comenzaba a ser visto con buenos ojos. Es que el partido viajaba sin discusiones hacia ese destino. Pero el centro de Zárate que Bordicio bajó de cabeza y Astudillo transformó en gol rompió todos los esquemas.
Apenas tres minutos (más el descuento) eran muy poco para torcer el resultado. Más si Tiro no mostraba estar capacitado para hacerlo. Y en medio de la desesperación llegó la escalada de Del Vecchio al área contraria lo que hizo que Guaymas tuviera toda la libertad para definir con un pelotazo largo en la contra.
De golpe, nada. Lo que pintaba para un punto ¿atractivo? trocó por un revés que no hizo otra cosa que reafirmar la idea de que el tren del Clausura está cada vez más lejos. Esta vez la igualdad hubiera sido un aliciente, pero al campeón todo le está costando el doble. Para Tiro, la mano viene cambiada. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El Chueco García intenta cortar el avance de Guaymas. | | |