¿Escuela secundaria para todos o de elite?

Una profesora critica la reciente disposición de permitir entrar en el Polimodal adeudando dos materias, porque "echa por tierra el pedido del ministro Filmus de sostener la calidad educativa como una fortaleza para mejorar el nivel de los aprendizajes" ( La Capital 15/3/05). Resulta llamativo que la estrategia para mejorar la calidad educativa pase por expulsar del sistema educativo a alumnos que adeuden una o dos materias, porque es sabido que esos alumnos, según la norma anterior, ni repetían ni seguían: quedaban en la nada. Seguramente hay quienes sientan nostalgia por la secundaria de hace cincuenta años, ordenadita, previsible, pocos eran los que entraban y menos aún los que terminaban. Pero estamos por una escuela de todos y para todos. De cualquier manera en la vieja secundaria también se podían llevar dos materias: ha sido una medida de los "genios" de la implementación de la Ley Federal el dislate de que en 7º, 8º se puedan llevar una, ninguna en el 9º y dos en el Polimodal. Y mala lectura se hace de lo que dice Filmus, que ha criticado a la secundaria elitista, expulsora. Como hemos dicho muchas veces, incluso en normas, ni retención sin calidad, ni calidad sin retención; el reto es resolver ambos objetivos, lo que no es fácil. Sobre el caos del inicio de clases, que no se sabe cuántos chicos hay, es cierto. Jamás que yo recuerde, ni siquiera con administraciones ajustadoras o autoritarias, un paro docente se hizo en el período de exámenes e instancias de apoyo como ocurrió ahora con la EGB 3 y el Polimodal, por lo que cuando hay algún día de clases al quedar pendiente exámenes la situación es caótica. ¿Por qué se hizo paro en esos días y no cuando comenzaban las clases o después?; es algo que deberán preguntarse quienes decidieron eso. La profesora afirma que con este cambio de norma a los alumnos "les asiste el derecho a peticionar por nuevas oportunidades". Seguramente la nota la escribió antes de enterarse que, por entender lo mismo, establecimos una mesa extraordinaria, y es probable que con ello también a las escuelas le aumente su trabajo y problemas (más planillas, superposición de exámenes y clases, etcétera). Pero la escuela está para los alumnos y no al revés. Dado el irregular comienzo de clases y la situación actual, es bueno que un grupo de alumnos esté en estos días estudiando y preparándose, aunque sea en su casa, teniendo la nueva posibilidad de no quedar excluídos del sistema educativo o evitar repetir, obviamente si se preparan y rinden bien. La profesora señala que "la imagen de coherencia, responsabilidad y mesura deberá ser lo que nos identifique como educadores". Justamente de eso se trata: en dos congresos de nivel medio que se hicieron el año pasado y el anterior, criticando la implementación, se plantearon un conjunto de reivindicaciones: eliminar el inadecuado sistema de promoción del Polimodal, recuperar la Educación Técnica, modificar el decreto Nº 1553, permitir que se pudiera pasar al polimodal adeudando hasta dos materias. Justamente hemos hecho todo eso (y faltan otras cosas) porque somos coherentes y tomamos la cuestión educativa en serio, más allá de reconocer que no es fácil realizar los cambios y no siempre salen las normas en los tiempos que deseamos, pero lo importante es que salen y los alumnos se verán favorecidos con ello. Pretender tener a todos los chicos en la escuela implica más problemas, atender casos de todo tipo y que el drama social aparezca con crudeza. No es fácil ser directivo y docente en esos contextos, pero no hay salida para un país si no intenta educar a quien debe ser su soberano. Y excluyéndolos, o no tomando en la escuela a sus propios repetidores, sólo ayudamos a marginarlos aún más.

Fernando J. Pisani. Director provincial de Educación Media y Técnica