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 viernes, 04 de marzo de 2005  
La ONU pidió investigar una brutal matanza en Colombia

Bogotá. -La ONU se declaró ayer "horrorizada" tras visitar la zona de la matanza de ocho personas en el noroeste de Colombia, y pidió una investigación pronta para determinar los autores del sangriento hecho, del que los pobladores acusan al Ejército, mientras las autoridades sindican a las Farc.

El 21 y 22 de febrero, un comando armado asesinó y descuartizó a ocho personas, entre ellas cuatro menores de edad y un defensor de los derechos humanos, en una "comunidad de paz" del municipio de Apartadó, departamento de Antioquia. El director adjunto de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, Amérigo Incalcaterra, dijo que encontró una población atemorizada y con un miedo generalizado a todos los actores armados, por lo que calificó el hecho de "vergüenza para la humanidad".

Incalcaterra indicó que a pesar de que no pudo hablar con testigos directos del crimen, recibió testimonios que dan cuenta de la delicada situación, que amerita una "pronta investigación porque hay muchos temas que hay que aclarar y la comisión de la Fiscalía tiene que producir cuanto antes unos resultados para indicarnos a todos la autoría de este lamentable suceso".

Mientras tanto, la Fiscalía colombiana desestimó ayer en un principio la participación del Ejército en la matanza, y acusó tácitamente a las Farc. El director regional de Fiscalías en Antioquia, Francisco Galvis, señaló además que los rebeldes atacaron la comisión del organismo investigador que se dirigía a la zona para hacer las pesquisas de la masacre, con el resultado de un policía muerto y otros dos heridos que protegían esa delegación.

Tras el ataque, un grupo más reducido de fiscales visitó la zona para continuar las investigaciones y descartó en principio la participación de las tropas oficiales. "Allí no hay fuerza pública, la fuerza pública está situada a una prudente distancia, dadas ciertas regulaciones de protección que les han dado los organismos internacionales a estas comunidades de paz", precisó.

Agregó que "incluso en la región dicen que ese poblado es el sitio de descanso y veraneo para los alzados en armas. Es un lugar que tradicionalmente ha servido de asiento para las Farc".
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