Salas no estará en el cotejo con Nacional

El Matador sufre una contractura en el gemelo derecho

El delantero de River, Marcelo Salas, dijo ayer que se siente "mejor" luego del golpe que recibiera ante Argentinos Juniors en la rodilla derecha, el domingo pasado, pero aún así no jugará con Nacional de Montevideo mañana por la Copa Libertadores, ya que también sufre una contractura en el gemelo derecho.

Más allá del optimismo del futbolista, es un hecho que no solamente no podrá actuar mañana en el Monumental ante los uruguayos, sino que también está prácticamente descartado para el encuentro del domingo venidero frente a Instituto, por el Clausura.

Así lo informó anoche el médico del plantel, Luis Seveso, luego de someter al futbolista a una serie de estudios para determinar la gravedad de la lesión. "Es una fuerte contractura y nada más", aseguró el profesional.

El chileno volvió a jugar en forma oficial después de 112 días de inactividad y el domingo anotó dos de los tres goles con los que su equipo empató 3 a 3 frente a Argentinos Juniors.

"No me molesta y puedo caminar bien. Tengo mucha confianza y espero seguir por esta senda, que es lo que me hace bien", destacó el delantero de River.

Salas explicó que la contractura "es en el gemelo derecho. Pero estoy bien y con mucha fe. Ojalá pueda estar el domingo, porque sé que en buenas condiciones físicas puedo hacer diferencia".

Tampoco estará el colombiano Jairo Patiño, quien tiene un golpe en el muslo de la pierna izquierda y quedó también descartado para el choque frente a Nacional por el grupo 5 del torneo continental.

Otro lesionado en la legión millonaria es el defensor Javier Gandolfi, con un fuerte golpe en el gemelo derecho, por lo que deberá estar sin jugar al menos hasta el sábado, aunque se estima que tampoco saldrá al campo de juego para enfrentar a los cordobeses.

Pero la lista sigue, ya que el lateral derecho Ricardo Rojas será sometido hoy a un estudio médico exhaustivo para determinar si sufre de un desgarro. El futbolista regresó al fútbol oficial hace dos domingos, luego de permanecer sin jugar por seis meses debido a una rotura de ligamentos cruzados, la peor de las lesiones para un jugador. (Télam)