En el aula: 1812 - Creación de la Bandera

El hecho más original, trascendente y fundacional de Rosario

Cuando el 27 de febrero de 1812 el abogado, político, militar, periodista y educador Manuel Belgrano, uno de los próceres más intachables en su vida tanto pública como privada, creó, hizo bendecir, enarboló y juró por primera vez la Bandera -uno de los mayores símbolos de nuestra identidad nacional- en las barrancas del Paraná a orillas de Rosario, en ese mismo acto produjo el hecho más original, trascendente y fundacional de la ciudad. Desde este histórico e insoslayable suceso patriótico, símbolo local y nacional de unión y libertad, de pertenencia y hermandad, puede marcarse un "antes" -siempre lo hay- y un "después". Si todo sistema social se sostiene sobre un hecho o un mito fundacional que permite construir una idea de pertenencia sin distinciones sociales, raciales, religiosas, políticas, culturales o económicas, sin duda que el mismo ha sido aquí el protagonizado ese día. Sin embargo, por otro lado, lo que tenemos es una serie de episodios puestos todos al mismo nivel de importancia y cuyo resultado palpable es una tremenda confusión que lleva cada tanto a no saber cuándo festejar el Día de Rosario ni por qué. Así, algunos hablaron de la instalación de un pueblo de calchaquíes o de la designación de un alcalde de la Hermandad en 1725 y dieron la fecha del 4 de octubre; otros dijeron que la ciudad "no fue creada por indios sino por blancos"; otros nombran a la Virgen de Rosario, dan el día de la batalla de Lepanto (1571) entre cristianos y otomanos, 7 de octubre, pero sin año porque no hubo un fundador; otros dicen que ese honor le correspondería a Santiago Montenegro porque fue quien loteó estas tierras y también están los que fogonean el día 5 de agosto de 1852 cuando Rosario -ninguna, por otro lado, con mayor derecho a llamarse "Belgrano" o "De la Bandera"- fue declarada ciudad en el marco de la lucha fraticida entre unitarios y federales.