Mirás comprometió su aval al cierre dominical

La Iglesia redactará un documento. Forman mesa de consenso. Los empresarios piden una ley provincial

La puesta en práctica del descanso dominical continúa movilizando a los sectores vinculados al comercio de la ciudad. Directivos de la Asociación Empresaria de Rosario, el Centro de Unión Almaceneros, la Sociedad de Carniceros y Asamblea de la Pequeña y Mediana Empresa se reunieron con el arzobispo de Rosario y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Eduardo Mirás, para plantearles la necesidad de que la Iglesia apoye el cierre de los negocios los días domingos.

Según manifestaron los empresarios a la salida del encuentro, el máximo referente católico de la ciudad se comprometió a confeccionar un documento donde se exprese el apoyo a la medida y se decidió formar una mesa de consenso con la participación de todas las cámaras y entidades vinculadas al tema, para confeccionar un proyecto de ley provincial.

Aunque desde el ámbito nacional la Confederación Nacional de la Mediana Empresa (Came) motoriza un proyecto de ley nacional para recuperar la plena vigencia del descanso dominical, como primer paso, los dirigentes locales apuntan a solucionar el problema a nivel provincial.

En la lucha gremial el apoyo de la Iglesia entra en escena porque para la religión católica el domingo es el día para reflexionar y dedicarlo a la familia y a Díos, por lo cual el hombre no debe trabajar. La Biblia lo expresa así: "Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación" Génesis 2:2-3.

Rubén Milito, titular del Centro Unión de Almaceneros, señaló que monseñor Mirás consideró al tema importante "desde el punto de vista del Señor" y remarcó que se formará una mesa de consenso. "Hace muchos años que discutimos sobre la implementación del descanso dominical, el cierre de los comercios en General Pico reavivó el tema y creemos que es una buena oportunidad para lograr una deuda gremial pendiente", indicó. No obstante, advirtió que el retorno del descanso dominical despertará el malestar en los grandes grupos económicos vinculados al consumo. "Se van a oponer pero nosotros luchamos contra la concentración económica y las grandes superficies son uno de los actores principales", apuntó.

Por su parte, José García, titular de la Sociedad de Carniceros, graficó la posición: "Estamos convencidos del tema. El hombre primero y la economía después. El domingo es para la familia y no nos convencemos con que en virtud de la apertura económica ese día se debe trabajar".

El representante de los carniceros comentó que en España desde el 98 los comercios se cierran el domingo, sólo 8 días abren sus puertas, y gracias a esta medida las pymes incrementaron sus ventas.


Los ejes de la polémica
Un punto polémico en la discusión es si todos los negocios deben cerrar o no. Para calmar las aguas Elías Soso, presidente de la Asociación Empresaria, dejó en claro que "se respetará la gastronomía, el turismo, el entretenimiento y la actividad cultural". Para ser más claró dijo: "No se paralizará a la ciudad".

"La Argentina tiene que quebrar la idea de que el hombre está al servicio de la economía, es al revés. Con el encuentro con monseñor Mirás dimos una puntada más para lograr el descanso dominical", precisó Soso. El dirigente mencionó que para las pymes abrir los domingos es un esfuerzo económico extra. "A las pymes les sale caro", señaló y agregó que también "hay un estudio de dos cadenas de hiper y supermercados que dicen que si cierran los domingos bajarían entre un 1 y 2% el costo de la mercadería".

Milito, García y Soso, ayer en el Arzobispado.