| sábado, 19 de febrero de 2005 | Unos dos mil docentes de la UNR serán evaluados Pertenecen a las doce facultades de la UNR y abarca a titulares y adjuntos. Aseguran que el desafío pasa por mejorar la preparación didáctica Unos dos mil docentes de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) serán evaluados este año en sus tareas de enseñanza, formación, extensión, investigación y gestión. Este proceso de control se da desde hace cinco años, de manera periódica. El secretario académico de la UNR, Alberto Petracca, asegura que cómo planificar, desarrollar y evaluar una clase siguen siendo unos de los desafíos en la formación de los docentes universitarios.
En el año 2000 la UNR comenzó un proceso de análisis de los docentes que trabajan en su ámbito, tanto titulares como adjuntos, asociados y jefes de trabajos prácticos y ayudantes. En ese momento, unos 2.000 educadores pasaron por este "examen" a cargo de comisiones externas. El número fue significativo dado que esta evaluación comprendió a aquellos que trabajaban en el ámbito universitario desde la vuelta al período democrático hasta esa fecha. Ahora, ese mismo grupo volverá a estar bajo la lupa -tal como lo establece el Consejo Superior de la UNR-.
La evaluación que se aplica en el ámbito de la UNR es por juicio de pares, es decir por comisiones interdisciplinarias conformadas por profesores de distintas facultades de la UNR, y también de otras universidades nacionales.
Esta vez, el 15 de abril próximo será la fecha límite en la que todos los docentes de las 12 facultades que integran la UNR deberán presentar sus informes, donde tendrán que detallar sus acciones de los últimos cinco años, en los campos de la docencia, la investigación, la formación, la gestión y la extensión. El modelo a completar puede bajarse de internet, de la página web www.unr.edu.ar
Sobre esos mismos informes trabajarán luego las comisiones evaluadoras, cuyos resultados se conocerían a fin de este año.
Impacto significativo El secretario académico de la UNR, Alberto Petracca, señala que esta evaluación periódica tiene un impacto significativo sobre la legitimación de lo actuado en el trabajo y en las funciones que les toca cumplir a los docentes.
Si bien reconoce que puede cuestionarse la forma elegida para evaluar a los docentes, asegura que "hay un alto consenso y participación respecto de este método de seguimiento". Agrega que han integrado las distintas comisiones evaluadores de jerarquía de otras universidades nacionales, en tanto que el modelo de examen ha sido considerado por otras casas de altos estudios.
Lo cierto es que el secretario académico define a este proceso como un instrumento de la política educativa de la UNR, ya que además de relegitimar en sus cargos a los docentes, permite ver cuáles son los desafíos que tiene por delante la UNR.
Y a renglón seguido cita como ejemplo la necesidad detectada de "avanzar en la formación de posgrados, en la actualización disciplinaria y en la didáctica".
Este punto parece ser uno de los que marca el rumbo a trabajar: "Hay docentes que son muy buenos para la disciplina, pero no saben formular un examen, una clase, es decir el cómo y qué de la enseñanza", afirma el secretario. Sobre este terreno -agrega- la UNR ha trabajado en distintos cursos de apoyo a los docentes, además de contar con una maestría en educación universitaria.
Igual, Petracca sostiene que el proceso evaluativo iniciado hace cinco años por la UNR ha generado lo que él denomina "un proceso silencioso al volver la atención del docente a la autoevaluación de su carrera, además de un fortalecimiento en la formación de posgrados, entre otras demandas".
Por otra parte, y al ser consultado sobre los riesgos de que los informes favorezcan a quienes se dedican en su carrera docente sólo a reunir certificados, Petracca responde: "El riesgo siempre está, pero nosotros nos quedamos con la honestidad del docente. Sabemos que se trata de una evaluación imperfecta, también que hay aspectos que no entran en esta evaluación, como las llegadas tardes de un profesor a la clase o el trato con los alumnos. Aquí hacemos un seguimiento de lo que se puede objetivar".
Por lo pronto, ya se sabe que en la primera evaluación a la que se presentó este mismo grupo que se será examinado este año un 20% tuvo un rendimiento no satisfactorio, en tanto que un 5% fue separado más tarde del cargo por no cumplir con los requisitos mínimos fijados para estar frente al aula.
La evaluación considera una segunda oportunidad, a los dos años, para quienes no alcanzan a cumplir con todos los ejes básicos exigidos, o bien para aquellos que en la primera presentación no completaron sus informes.
Ahora habrá que esperar hasta fin de año para saber quiénes y cuántos pasaron satisfactoriamente la evaluación. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Los profesores serán evaluados en su formación académica. | | |