El fiscal general de Paraguay acusó al "canciller" de las Farc

La guerrilla colombiana aparece detrás del secuestro de la hija de Raúl Cubas

Rodrigo Granda, cuyo arresto irregular causó la crisis entre Chávez y Uribe, habría dirigido el rapto en Asunción

Asunción/Bogotá. - El fiscal general de Paraguay, Oscar Latorre, denunció el nexo entre las guerrillas colombianas y la banda que secuestró a la hija del ex presidente Raúl Cubas. Un partido de izquierda de Paraguay, Patria Libre, aparece directamente involucrado en el delito, según la denuncia, y uno de sus directivos está detenido por el caso de Cecilia Cubas, quien sigue cautiva desde que fue raptada el 21 de septiembre de 2004. El caso tomó mayor dimensión porque el fiscal general paraguayo aseguró que el jefe guerrillero colombiano Rodrigo Granda asesoró y dirigió por Internet el secuestro de Cecilia Cubas.

Granda es el líder guerrillero cuyo irregular arresto causó una grave crisis diplomática entre Colombia y Venezuela, ya que según denunció el gobierno de Hugo Chávez fue secuestrado en Caracas. Ayer Chávez y su par colombiano, Alvaro Uribe, se reunieron para dar por cerrado el episodio (ver aparte). Al mismo tiempo, la denuncia del fiscal paraguayo fue ratificada desde Bogotá por altos exponentes del gobierno de Alvaro Uribe.

El fiscal Latorre aseguró que otro combatiente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), identificado como "Santiago", supervisó en septiembre de 2004 el secuestro de Cecilia Cubas, bajo directivas de Granda.

En una conferencia de prensa ofrecida el lunes, Latorre había asegurado que Osmar Martínez, uno de los líderes del partido de izquierda Patria Libre, "está complicado en el secuestro, de acuerdo con las evidencias de los fiscales, y se pudo determinar que mantenía relación con Rodrigo Granda, canciller de las Farc".

El fiscal Latorre ratificó ayer los datos brindados el día anterior, reiterando que "nuestros investigadores poseen informaciones concretas acerca del relacionamiento de Granda con Martínez".

Latorre comentó que "los investigadores tienen evidencias de que Martínez estuvo asesorado por Granda y que, probablemente, militantes de Patria Libre eran entrenados en Colombia. Poseemos, además, evidencias de que Martínez le pidió a Granda un asesor para que los conduzca en las negociaciones con la familia Cubas", por la liberación de Cecilia. Probablemente, ese asesor fue "Santiago".

Agregó que "los investigadores del secuestro accedieron a una información que revelaba la presencia en la zona de Caaguazú (a 200 kms al este de Asunción) de un combatiente de las Farc, quien monitoreaba los detalles del plagio". Latorre indicó que "Martínez se movía bajo las órdenes de ese combatiente colombiano identificado con el alias de Santiago".

Santiago "habría ingresado al Paraguay a comienzos de 2004. Su presencia fue rastreada luego de que se recibiera aquí una alarma de las autoridades policiales de Colombia a las de Brasil, ya que Santiago, con identidad verdadera, quedó registrado en uno de los aeropuertos de Brasil", apuntó. Latorre señaló ayer que "la conexión de Martínez con Granda se hacía a través del correo electrónico".


Los mail incriminatorios
Latorre añadió: "la dirección virtual de Martínez era [email protected], la dirección de Granda era [email protected] y la cuenta de correo habilitada para negociar el rescate de Cecilia era [email protected] . Estos datos virtuales están confirmados por un reporte que nos hizo llegar la empresa Microsoft", añadió.

Latorre aseguró que Cecilia Cubas fue identificada con el sobrenombre de "Fruta" para las negociaciones con sus padres quienes el 12 de noviembre de 2004 pagaron 800.000 dólares para su liberación. Unos cuatro días después, los delincuentes informaron que recibían ese dinero como adelanto de los cinco millones de dólares que esperaban obtener para dejar en libertad a la víctima. El ex presidente Cubas declaró que "no poseemos esa suma porque en Paraguay es imposible hacer algún tipo de negocios como para ganar esa fortuna".

Granda fue capturado en diciembre pasado en Caracas en un controversial operativo que terminó con el jefe guerrillero en manos de las autoridades colombianas, previo pago de una recompensa en la ciudad fronteriza de Cúcuta. El gobierno de Hugo Chávez denunció que militares venezolanos secuestraron al rebelde para entregarlo a policías colombianos a cambio del dinero. El propio Chávez encabezó las denuncias, y además ordenó bloquear el comercio bilateral hasta tanto "el presidente Uribe pida disculpas", lo que llevó al conflicto a un nivel peligrosamente intenso. Pero el gobierno colombiano aseguró que el guerrillero fue capturado en territorio nacional. Y envió a Caracas una detallada lista de las actividades públicas de jefes de las Farc y del ELN en Venezuela.


200 viajes por la región
Las autoridades colombianas creen que durante sus más de 200 viajes por América latina y Europa en las pasadas dos décadas, Granda hizo tareas de propaganda de las Farc, estableció nexos con narcotraficantes mexicanos y ayudó a los rebeldes a comprar un gran embarque de armas a un jefe peruano de inteligencia.

El ministro de Defensa de Colombia, Jorge Alberto Uribe, en viaje por Holanda, dijo que la supuesta asesoría prestada por la guerrilla colombiana a los secuestradores de la hija de Cubas "es una prueba más de los tentáculos internacionales de los rebeldes que se financian de actividades criminales".

A su vez, el fiscal general colombiano, Luis Camilo Osorio, aseguró que la cooperación judicial con las autoridades de Paraguay ha permitido establecer la existencia de vínculos entre las guerrillas colombianas y organizaciones criminales de ese país. "Desde hace tiempo que tenemos noticias del auxilio dado por parte de organizaciones delictivas alzadas en armas de Colombia, Farc y ELN, en Paraguay. Hemos visto que se ha encontrado material de propaganda de estas organizaciones delictivas", en Paraguay, comentó Osorio.

Uribe y Chávez ayer en la esperada reunión.