El hábito de fumar aumenta el riesgo de contraer cáncer de vejiga

Belén Travesaro / La Capital

"Algunas sustancias químicas del cigarrillo son cancerígenas y aumentan cuatro veces más la posibilidad de desarrollar un cáncer en la vejiga", afirmó el urólogo Fernando Soldano. Aunque muchos asocien este vicio sólo al riesgo de padecer cáncer de pulmón, se confirmó que también daña la vejiga. El especialista, consultado por La Capital, expresó la necesidad de concientizar a la población sobre los factores de riesgo, ya que cada vez son más los diagnósticos de la dolencia que afecta a la vejiga.

Soldano especificó que en los últimos años la incidencia de cáncer de vejiga creció en forma constante, a un ritmo de 0,8% por año. Para evitar esto, el urólogo recalcó la importancia del diagnóstico precoz, ya que en la mayoría de los casos permite la curación.

Especialistas notaron que el daño que provoca el cigarrillo es el mismo para ambos sexos, sin embargo el cáncer de vejiga es más frecuente en los hombres. Dentro de los tumores en el tracto urinario, la vejiga es la localización más común. Es 2,7 veces más frecuente en hombres que en mujeres. En los primeros constituye la quinta neoplasia más común, después de los cánceres de próstata, pulmón, cólon y recto. En tanto que en ellas es la octava causa.

Las sustancias químicas cancerígenas que contiene el cigarrillo son metabolizadas por el fumador y eliminadas a nivel renal, a través de la orina. Así, toda la mucosa urinaria queda expuesta a estos tóxicos, siendo la vejiga el órgano que más tiempo queda en contacto con ellos. Esto "puede desencadenar, a largo plazo, un proceso tumoral en las células del epitelio de la vejiga", advirtió el especialista.


Atención a los síntomas
Además del cigarrillo, otras causas que contribuyen al aumento en la tasa de incidencia del cáncer de vejiga -según el profesional- son el incremento en el promedio de vida de la población y los avances en las técnicas diagnósticas. En contraposición, "se viene observando una disminución en la mortalidad, que se debe a los avances terapéuticos", dijo Soldano.

El profesional recomendó conocer los factores de riesgo para consultar a tiempo. En este sentido detalló los principales:

u Hábito de fumar.

u Presencia de antecedentes familiares.

u Exposición a tinturas de anilina, gases de combustión y hollín de carbón.

u Ingestión de analgésicos como la fenacetina, que posee una estructura similar a la de las tinturas de anilina.

u Poseer infecciones bacterianas y parasitarias.

u Cistitis crónicas secundaria a cuerpos extraños como cálculos o catéteres.


Para saber cuándo dichos factores conducen al desarrollo de la enfermedad, Soldano explicó los síntomas y recomendó prestar atención a ellos para posibilitar la intervención temprana del urólogo.
El síntoma principal es la hematuria (orina con sangre). "Si este indicio está presente hay que consultar al médico, más allá de si está acompañado de otros signos de la patología", recomendó el especialista. Otras señales que origina la enfermedad son irritación vesical, urgencia miccional (apuro para orinar) y ardor al orinar, entre otros.

El profesional agregó que en el 85% de los casos el tumor vesical se manifiesta a través de hematuria indolora. En tanto que la segunda forma más común de presentación es mediante la irritación vesical con polaquiuria (aumento en la frecuencia miccional), urgencia miccional y disuria (dolor al orinar). Es menos frecuente que la alteración se refleje a través de dolor lumbar, edemas en miembros inferiores o un tumor palpable en la pelvis.

Cabe aclarar que los síntomas descriptos no siempre están relacionados con cáncer, sino que pueden originarse a raíz de una cistitis, infección urinaria, cálculos en la vejiga, entre otros.


Cómo detectarla
Ante la sospecha de enfermedad conviene la consulta al urólogo, quien cuenta con técnicas específicas para la detección de la afección. En general el primer estudio al que recurre el médico es la ecografía, con el fin de evaluar si hay tumores en el tracto urinario.

Cuando este diagnóstico despierta dudas se puede practicar una citoscopía, examen que consiste en la introducción de una endocámara en la vejiga. En algunos casos, la citoscopía puede llegar a necesitar como complemento la realización de una biopsia que arribará a mayores precisiones.

La detección precoz de los tumores de vejiga puede llevar en la mayoría de los casos a la curación. En cambio, si el paciente asiste a la consulta médica en forma tardía las posibilidades de curación son menores, ya que es probable que exista un proceso metastásico (expansión de las células cancerígenas a estructuras distintas al órgano afectado inicialmente).

La vejiga está expuesta a las sustancias cancerígenas del cigarrillo.