| domingo, 23 de enero de 2005 | "Defenderemos este proyecto a muerte" Cuffaro dice que hay que arriesgar para lograr algo Las reflexiones de Zof y Cuffaro ofrecen la solidez de la educación, la virtud del sentido común y el invalorable aporte de las vivencias. Precisamente ese apego por la autorreferencia es el disparador para explicar cómo hicieron para sacar al equipo de la zona incendiaria en la que lo encontraron cuando se hicieron cargo tras la renuncia del uruguayo Víctor Púa.
"Nosotros si agarramos es porque nos teníamos toda la confianza. Había buenos jugadores y una camada de pibes que ya conocíamos. Lo único que hicimos fue acomodarlos en la cancha de acuerdo a nuestro gusto futbolístico", explicaron casi al mismo tiempo.
-Cuffaro, ¿no es peligroso apostar a un equipo tan joven si la meta es apuntar alto?
-Y... tiene sus riesgos, pero los que estamos en fútbol sabemos que arriesgamos siempre. Hay que aprender a convivir con eso. Pero nuestro proyecto es ese y vamos a luchar a muerte para defenderlo.
-Don Angel, ¿está bien decir que ahora sí arranca su verdadera gestión ya que el equipo que agarró en el torneo pasado lo formó el uruguayo Víctor Púa?
-Agarramos lo que había en el club. No lo dejó Púa ni nadie. Estos chicos estaban en el club. Además a la mayoría ya los conocíamos desde cuando nosotros estábamos en las divisiones inferiores. Inclusive a Púa traté de ayudarlo con apuntarle a algunos de estos jugadores, pero el hombre no tuvo mucho tiempo para verlos. Por eso digo que acá no dejaron nada armado. En ese momento había varios jugadores que le habían traído a Púa que nosotros no usamos y ahora dejamos que se fueran.
-Y ahora el equipo sí está armado.
-Mire, con tantos jóvenes nunca se puede decir que el equipo ya está consolidado. Hasta los mejores equipos tienen momentos con problemas y sufren de bajones. Fíjese, es raro que los equipos del fútbol argentino que salen campeones al otro año se caen. River y Boca, que tienen los mejores planteles y dos o tres jugadores por puesto, salieron campeones y después no pudieron mantener el mismo nivel. (Don Angel)
-Uno dice que un equipo está armado cuando encuentra el equilibrio entre la experiencia y la juventud. Y nosotros hoy eso no lo conseguimos. No hay que mentirle a la gente, Central es un equipo muy joven, que está en formación. Si repasamos algunos partidos del torneo pasado que jugamos en el Gigante nos vamos a dar cuenta de que en muchos nos jugó una mala pasada la falta de experiencia. De ahí que nuestra apuesta es que el equipo siga creciendo, manejando otros conceptos y madurando para que nos acerquemos a lo pretendido. Pero no podemos negar la realidad, todavía nos falta esa cuota de experiencia que uno realmente necesita para decir que el equipo ya está, que la cosa está armadita. Además ahora no tenemos a ese jugador que absorba toda la responsabilidad. (Cuffaro Russo)
-Don Angel, si el presidente Scarabino le dice que el club sólo puede traerle uno de los dos refuerzos que pidió, ¿por cuál se inclina, por el volante o por un delantero?
-Nosotros precisamos a los dos. Porque un buen equipo también se hace con las variantes o los recambios que se tienen. Caso contrario, hay que recurrir a los chicos como estamos haciendo nosotros ahora. Y como le dije antes, a los pibes hay que llevarlos de a poco. Necesitan respetar sus tiempos de crecimiento. Es muy difícil que entre un jugador de las inferiores y enseguida la rompa. Yo conocí a muy pocos.
-¿No pensó en suplir la ausencia de Coudet adelantando a Ferrari al medio y poniendo a Moreira como lateral derecho?
-Esa idea se nos cruzó en algún momento por la cabeza. Pero sabe lo que pasa, Ferrari anda muy bien donde está. Y cuando un jugador anda bien en un puesto, nunca conviene correrlo. A lo largo de mi carrera tuve a varios jugadores de las características de Ferrari y algunos dieron resultado cuando los adelanté hacia el medio y otros no. No es lo mismo venir desde atrás que estar más adelante. Cuando uno está más adelante ya lo marcan más. En cambio, desde atrás uno encuentra mejor los espacios. Por eso la idea es que Ferrari se quede donde está, siempre y cuando no tengamos la obligación de utilizarlo por alguna circunstancia especial.
-Ariel, ¿existe la chance de cambiar el doble 8 por una especie de doble 10, incluir un jugador que juegue más cerca de Papa?
-Son todas variantes que estamos viendo. Cuando uno ve a un jugador que está afuera que anda muy bien, trata de buscarle la vuelta a la cosa para que tenga un lugar. Esto que planteás en algún momento lo pensamos. Pero también hay que analizar si con esa movida no resentimos la estructura del medio, algo que nosotros creemos que hoy está solidificada.
"Lo que usted quiere decir es que pongamos un volante más que trabaje por el lado izquierdo", irrumpió como un rayo don Angel con su concepto. Y enseguida argumentó su intromisión: "Nosotros eso ya lo hicimos con Andrés Díaz en muchas oportunidades. Andrés suele trabajar por el sector izquierdo acompañando a Papa. Lo que pasa es que tal vez no se note mucho porque su característica es correr. Cuando uno dice un diez, se imagina a un jugador de esos habilidosos y que no corran tanto. Pero si ponemos a un diez clásico perderíamos el trabajo del mediocampo. Por la manera que tiene de moverse nuestro mediocampo con Papa y el otro que vaya por afuera que son como punteros, el jugador que colabora con el cinco en la contención es fundamental", finalizó el Viejo sabio. enviar nota por e-mail | | Fotos | | "A los pibes hay que llevarlos de a poco". | | |