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 domingo, 23 de enero de 2005  
Para beber: Uvas regadas por el Ebro

Gabriela Gasparini

A lo largo de toda la región del noroeste aparece como una constante la presencia de la uva Torrontés, ya comentamos sus características hace un tiempo, pero retorno con el único propósito de descubrir su cuna, el lugar que la vio nacer antes de que se naturalizara argentina. ¿Cuáles son las características de La Rioja española?

Empecemos diciendo que la región tuvo sus vaivenes como tantas otras, pero vale remarcar que a la hora de hacer vinos no es una improvisada, más bien es una de las más antiguas e importantes de España en esos quehaceres.

La palabra Rioja apareció escrita por primera vez en 1092, relacionada con un afluente del Ebro, justamente el río Oja, se supone que al principio se refería sólo a un pequeño territorio pero terminó denominando a toda una región.

La zona productora de La Rioja abarca ambas márgenes del río Ebro a lo largo de 120 kilómetros con un ancho nunca mayor a 50 kilómetros. Lo mismo que en otros países, en el comienzo fueron los romanos quienes propiciaron la elaboración del vino en el lugar. Superado el trance romano llegaron los musulmanes, quienes consiguieron paralizar casi por completo la producción al poner un empeño sin igual en desplazar la actividad hacia otras zonas de la península. Eso fue así hasta que el Cid Campeador tomó riendas en el asunto, sabía que Charlton Heston no nos podía fallar, y entonces el espíritu vitivinícola renació de sus cenizas como suele decirse.

En la Edad Media se asentaron tres monasterios de la orden del Cluny, procedentes de la Borgoña que aportaron sus conocimientos para beneficio de todos. Al principio predominaban las variedades blancas, y los tintos eran vendidos a precios muy inferiores. En el siglo XIV los británicos ya se inclinaban por lo que llamaban "blancos pardillos", productos de la mezcla de tintos y blancos. Vinos finos que tuvieron su apogeo cuatro siglos más tarde.

La obsesión por la calidad de sus caldos viene de lejos. Un ejemplo de ello es la ordenanza establecida por el alcalde de Logroño en 1635, mediante la cual se prohibía el tránsito de carruajes en zonas cercanas a las bodegas, por miedo a que "las vibraciones generadas por su paso puedan perjudicar al preciado jugo y su crianza". Las idas y vueltas de guerras diversas volvieron a paralizar la industria hasta que en 1852 llegaron al sur de La Rioja numerosos productores de Burdeos huyendo del odio, y luego bastantes más cuando la filoxera hizo lo suyo en 1870. Muchas de las bodegas actuales más prestigiosas vieron la luz por aquel entonces. Uno de los pioneros fue el sacerdote Manuel Quintano y Quintano quien asistió a la elaboración de caldos en un chateaux francés y junto con su hermano Ramón pusieron en práctica los conocimientos adquiridos elaborando uno de los mejores vinos de todos los tiempos. Pero los píos riojanos deben su éxito internacional principalmente a dos marqueses, Murrieta y Riscal.

La Denominación de Origen Rioja fue demarcada por el Consejo Regulador en el año 1926 y es, junto con Jerez, la más antigua de España. Se divide en tres sub-zonas: Rioja Alta, Rioja Alavesa y Rioja Oriental, hasta no hace mucho conocida como Baja. La primera pertenece casi en su totalidad a la Comunidad Autónoma de La Rioja, y en ella predominan los suelos de tipo arcilloso-calcáreos y arcillo-ferrosos. La Rioja Alavesa, se asienta en el País Vasco, y su suelo es básicamente de piedra caliza y esquisto. Finalmente, La Rioja Oriental, se reparte entre las comunidades de La Rioja y Navarra, y descansa sobre suelos aluviales con componentes arcillosos y ferruginosos.

La Rioja es conocida en el mundo entero por sus excelentes vinos tintos, donde sobresalen las uvas Tempranillo, Graciano, Mazuelo y Garnacha. Pero no se deben olvidar sus blancos donde descolla la Viura y últimamente viene recuperando terreno la Malvasía. El Consejo Regulador estableció una serie de requisitos mínimos de crianza que sirven para clasificar los vinos, pero que a pesar de la influencia que tuvo sobre las otras DO del país dicen que aquí está cayendo en desuso. Vaya uno a saber.

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