| domingo, 23 de enero de 2005 | Culmina el cruce de los Andes de la Asociación Sanmartiniana Las Cuevas.- El cruce de los Andes que en 1817 José de San Martín consumó con más de 5.000 hombres en veinte días será homenajeado hoy por 150 expedicionarios que, tras siete días de marcha a lomo de mula, completarán el mismo recorrido hasta el Cristo Redentor, en la más numerosa campaña sobre esos macizos andinos desde la gesta del prócer.
La Asociación Cultural Sanmartiniana de Rosario, promotora por séptima vez desde 1977 del cruce a la cordillera, esta vez escogió el Paso de Uspallata, uno de los seis que eligió San Martín para avanzar sobre las tropas realistas en Chile.
A casi 200 años de esa gesta, contra la misma hostilidad del terreno y condiciones extremas del clima, la expedición culminará hoy en el Cristo Redentor, a 4.200 metros de altura, en la localidad mendocina de Las Cuevas, como forma de abordar el pasado fuera de los métodos tradicionales del mundo escolar y académico.
San Martín cruzó con 5.423 hombres cuyo destino posible era la muerte. Estos 150 expedicionarios (52 mujeres), de entre 13 y 75 años, sólo recrearon las extremas condiciones del cruce, por sus mismos caminos precarios, pero fueron asistidos por una estructura logística que les evitó buena parte del riesgo original.
Aun así, soportaron altas temperaturas durante el día, que caían bajo cero por las noches, mientras dormían a cielo abierto; alturas de hasta 4.500 metros con sus consecuentes "males", y tramos desérticos sin nada útil para la supervivencia.
El trayecto total fue de 230 kilómetros, con las escalas de Mendoza, El Plumerillo, Pampa de Canota, Agua de la Cueva, Uspallata, Polvaredas, Puente del Inca y Las Cuevas.
Una columna de 800 metros, liderada por un granadero a caballo, fue la imagen que sintetizó y simbolizó el paso de la columna por los puntos donde antes transitó el Ejército de los Andes.
Antes de la escalada al Cristo Redentor, en Las Cuevas, que se cristalizará esta noche, los expedicionarios sufrieron con los precipicios y pronunciadas pendientes que se presentan en el terreno que precede a Puente del Inca. (Télam) enviar nota por e-mail | | |