| domingo, 23 de enero de 2005 | La peregrinación a La Meca termina sin incidentes y con récord de gente Una lluvia inesperada acompañó a dos millones y medio de fieles durante cinco días La peregrinación anual a la ciudad sagrada de La Meca, en Arabia Saudí, concluía ayer bajo una inesperada lluvia luego de cinco días de rituales que terminan con el acto simbólico de lapidar tres pilares que representan al demonio. Las autoridades señalaron que la peregrinación (Haj) de este año, que terminaba esta madrugada, ha sido la mayor de la historia, con casi tres millones de personas. Las últimas cifras oficiales fueron de 2,56 millones.
La televisión saudí mostró imágenes de los peregrinos bajo la fuerte lluvia realizando el ritual de la lapidación y la obligatoria circunvalación de la Kaaba, la piedra negra de la Gran Mezquita de La Meca hacia la que los musulmanes dirigen sus plegarias.
La lluvia, poco habitual en el desértico país, no detuvo a las decenas de miles de personas que rodearon la piedra siete veces para terminar su viaje.
La prensa citó al portavoz del Ministerio del Interior, brigadier Mansur Al Turki, quien señaló que la multitud podía causar ayer una "densidad crítica" en el puente de Jamrat. Por eso, se tomaron medidas para regular el paso de los peregrinos en el puente de la ciudad de Mina, cerca de La Meca.
El año pasado murieron 251 personas al ser aplastadas en medio de una muchedumbre presa del pánico. Por eso, ahora la policía había formado barricadas humanas que obligaban a la gente a entrar por un lado y salir por el otro del puente, que soporta a 160.000 personas por hora, señalaron las autoridades.
Asimismo, este año el gobierno reemplazó los tres pilares a ser lapidados por muros más anchos, lo que ofrece un blanco más grande para evitar las aglomeraciones.
Los soldados se encargaban de vaciar el área de peregrinos que ya habían terminado con la ceremonia mientras palas mecánicas se llevaban los zapatos y zapatillas arrojados y abandonados en el lugar.
"La cifra de este año es más de medio millón más alta que la del año pasado", afirmó Al Turki.
Algunos asistentes afirmaron que el demonio representaba a todos los que persiguen a los musulmanes en el mundo. "Esto no es más que un acto de catarsis", dijo Saqr Muhammad Jalal, de Egipto. "Para mí, estos pilares representan los líderes mundiales que están matando o son responsables del genocidio de mis hermanos en Palestina e Irak", añadió.
Los peregrinos caminaron el jueves último desde Muzdalifa, donde reunieron los cantos rodados para lapidar al demonio. La ceremonia consiste en arrojar siete piedras cada día (de los tres en total) contra los tres pilares.
El ritual tiene lugar en el sitio en el que según la tradición Satán se apareció al profeta Abraham. Este, su mujer Agar y su hijo Ismael lanzaron cada uno siete piedras contra el demonio. El Haj es uno de los cinco deberes del islam y es obligatorio una vez en la vida para todo musulmán que esté en condiciones de realizarlo. (DPA) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Una multitud rodea a los tres pilares que representan al demonio. | | |