| miércoles, 19 de enero de 2005 | Espectáculo Los más de cinco mil invitados quedaron maravillados con la presentación, que comenzó con música, nubes de hielo seco y bailarines en el hangar de montaje del A380, uno de los mayores de Europa. Imágenes proyectadas en las paredes del edificio mostraban al Airbus y los bailarines suspendidos por finos cables parecían flotar en el aire. Cuatro niños tiraron de una cuerda blanca para develar el avión, iluminado por una luz azul. El A380 será seguramente un hito en la historia de la aviación civil, junto con el Boeing 747 y el Concorde. Al contrario que el supersónico Concorde, empero, cuyo mérito residía en la velocidad a la que podía cruzar el Atlántico, este avión será juzgado a la postre por la velocidad con la que pueda generar beneficios. Airbus dispone ya de 149 pedidos en cartera por un total de 280.000 millones de dólares "lo que para un avión de este tamaño que aún no ha volado es una actuación comercial extraordinaria", dijo su director general de Airbus Noel Forgeard. enviar nota por e-mail | | |