| miércoles, 05 de enero de 2005 | Servicios esenciales Imaginemos por un momento que, por ejemplo, los policías quieren festejar con sus familias la llegada del Año Nuevo y no se presentan a trabajar, aún conociendo la importancia de su servicio y las sanciones que les pueden caber si no lo cumplen. En una sociedad supuestamente organizada -en la que cada sector tiene una función asignada-, muchos servicios pueden realizarse dentro de un horario, pero otros se deben cumplir permanentemente porque su demanda no es previsible, es inadmisible que no se sancione
-sólo porque los afectados protestaron- la actitud de los taxistas y remiseros, que han dejado sin transporte a una ciudad de más de un millón de habitantes. Quisiera saber cuál fue el argumento que esgrimieron las autoridades responsables para dar marcha atrás en las multas correspondientes si no se cumplía con el servicio. Debemos tomar conciencia de la importancia que presenta cada oficio o profesión para la sociedad y exigir su cumplimiento estrictamente, de lo contrario aplicar las sanciones prometidas. Si no, no nos quejemos de que "en este país todos hacen lo que se les da la gana", ya que están dadas las condiciones para ello.
Cristian Moriñigo enviar nota por e-mail | | |