Trasladan al alumno que mató a tres compañeros en Patagones

Junior, el alumno de 15 años que asesinó a tres compañeros e hirió a otros cinco en una escuela de Carmen de Patagones, al sur de la provincia de Buenos Aires, fue trasladado a la ciudad de La Plata.

Fuentes judiciales indicaron ayer que el menor de edad fue trasladado al Departamento de Ubicación y Registro de Menores con sede en La Plata. "Ahora el citado organismo será el encargado de evaluar el instituto donde estará alojado el adolescente", agregó la fuente.

El adolescente estaba alojado desde el 28 de setiembre pasado en el destacamento de la Prefectura Naval Argentina (PNA) con asiento en el puerto de Ingeniero White, a ocho kilómetros del centro de Bahía Blanca.

La jueza de menores de Bahía Blanca, Alicia Ramallo, quien lleva adelante la causa por la tragedia en la escuela, decidió el traslado del adolescente a última hora de anteayer.

En la provincia de Buenos Aires se encuentran 28 centros de alojamiento para menores, de los cuales 26 son para casos relacionados con causas penales y otros 32 con régimen abierto para situaciones asistenciales.

En La Plata funcionan 3 con sistema cerrado, uno de ellos de máxima seguridad y otros 8 con internaciones tuteladas por el Estado. Además están habilitadas dos dependencias del Registro de Evaluación y Recepción, lugares en el que los menores como el caso de Junior permanecen hasta que se evalúen las condiciones de alojamiento necesarias para cada caso.

Los hechos ocurridos en Carmen de Patagones sacudieron a toda la sociedad cuando el 28 de setiembre último, el estudiante de 16 años del Polimodal Islas Malvinas disparó contra sus propios compañeros durante las primeras horas de clase, asesinó a tres de ellos e hirió a otros cinco.

Hijo de un oficial retirado de la prefectura, Junior utilizó una pistola 9 milímetros de su padre y provocó la muerte de Sandra Núñez, Evangelina Miranda y Federico Ponce, tres adolescentes de 15 años que estudiaban con él.

De acuerdo sus allegados, Junior era un joven muy reservado, retraído y con problemas de comunicación y relación con sus pares, situación que los docentes del colegio no pudieron prever o "escuchar", como reclamaron sus compañeros de curso.

Después de la tragedia, el chico se entregó sin resistencia y desde entonces permaneció alojado en la Prefectura Naval Argentina (PNA) hasta que anteayer se dispuso su traslado. (Télam)