 | viernes, 31 de diciembre de 2004 | Dreyfus y Noble aceptaron el reclamo tributario de la comuna Cerealeras le pagan el Drei a Timbúes El presidente comunal aseguró que algunas obras comenzarán el 15 de enero. Las compañías no dan fechas Las multinacionales Dreyfus y Noble aceptaron finalmente pagar a la comuna de Timbúes el Derecho de Registro e Inspección (Drei) que ésta les había demandado para el funcionamiento de las industrias que ambas empresas montarán en la región. A raíz de esto, el presidente comunal de esa localidad santafesina, Néstor Sánchez, anunció que el 15 de enero comenzarán las obras de infraestructura de la planta que montará la compañía de origen francés.
De todos modos, desde las empresas negaron que haya una fecha cierta para el comienzo de las obras sobre las costas del río Coronda.
Por otra parte, ayer los directivos de ambas compañías se reunieron con el ministro de la Producción de Santa Fe, Roberto Ceretto, para terminar de acordar los últimos detalles sobre las obras de infraestructura que la provincia se comprometió a realizar -a pedido de las cerealeras- para favorecer el acceso a los puertos y el suministro eléctrico para el inicio de las obras.
"Está todo acordado, sólo faltan ultimar detalles y lo haremos en una reunión el próximo 5 de enero", dijo Ceretto, quien confirmó además que las compañías están incluidas dentro del régimen de promoción industrial de la provincia que las exime del pago de ingresos brutos y ley 5.110.
Las inversiones que realizarán ambos grupos internacionales suman en conjunto 90 millones de dólares, de los cuales 65 corresponden a la planta procesadora y terminal que prevé instalar Dreyfus y los otros 25 correspondientes a los desembolsos que anunció Noble.
El acuerdo por el pago del Drei en Timbúes surgió después de varios meses de tensiones entre las compañías agroindustriales y la comuna. Desde un principio el presidente comunal manifestó que las empresas que querían asentarse en la región debían pagar tributos de la misma forma que lo hacen otras industrias del rubro asentadas desde General Lagos hasta Puerto General San Martín.
Tras el acuerdo "van a pagar alrededor del 75% de lo que nosotros habíamos pedido", confirmó Sánchez a La Capital , una cifra que representa "entre 60 y 70 mil pesos por mes" en concepto de Drei.
Con esta suma, la comuna de Timbúes "duplica su presupuesto", aseguró su titular, mientras que para las compañías se trata de cifras menores. Por caso, en el balance 2003 Dreyfus Argentina reportó ganancias finales por 165,5 millones de pesos, al tiempo que el impuesto que tributarían por una de las dos plantas que tiene en el país, sólo representan por año 840 mil pesos.
Esta cifra está muy lejos de la que habían dejado trascender referentes del sector agroindustrial, que hablaban del reclamo de impuestos por 600 mil pesos para con las cerealeras.
Ribetes del conflicto El conflicto entre las partes surgió cuando la comuna de la localidad santafesina derogó una ordenanza de promoción industrial que tenía la localidad, poco después de que se anunciaran las inversiones portuarias y aceiteras.
"Derogamos una vieja obsoleta ordenanza de 1996, que nada tiene que ver con la Argentina de estos tiempos y que hablaba de promoción industrial y no de puertos", argumentó entonces Sánchez.
La réplica no se hizo esperar y vino de parte de las compañías del sector agroindustrial que reclamaban "reglas de juego claras" y aseguraban que "esta decisión creaba inseguridad jurídica para las inversiones".
El directivo de Molinos, Juan Forn, se mostró preocupado por los avances en materia fiscal de los municipios. "El intento de establecer un gravamen en estas condiciones es un cambio en las reglas de juego, un pésimo precedente y un desincentivo a la inversión". Mientras que el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) y presidente de Bunge, Raúl Padilla, pidió "previsibilidad y estabilidad".
También la Bolsa de Comercio se sumó al reclamo y pidió "la eliminación de toda discrecionalidad en la sanción o aplicación extemporánea de normas de derecho".
Incluso las presiones a la comuna de Timbúes llegaron desde el propio gobierno de la provincia. El gobernador Jorge Obeid le planteó en sucesivas oportunidades para que la comuna retroceda en su decisión y ratifique la vieja ordenanza de promoción industrial. Durante la celebración del aniversario de Timbúes, el mandatario santafesino instó en forma genérica a los presidentes comunales a "que no jueguen a hacerse millonarios con este tipo de inversiones".
Sin embargo, el presidente comunal de Timbúes resistió y continuó con su decisión de reclamar el pago del Drei a las cerealeras que se instalarán en las riberas del río Coronda.
Esta decisión "estuvo sustentada en el respaldo del pueblo de Timbúes que estaba dispuesto a pedir que se vayan las empresas si no pagaban", confesó Sánchez.
El presidente comunal señaló que los contactos con la empresa Noble siempre se mantuvieron de algún modo, no así con Dreyfus, la cual remitió a la comuna una carta documento argumentando la inestabilidad jurídica de esta medida y cortando el diálogo. "Demostramos a raíz del diálogo con una de las empresas que esto no crea inestabilidad jurídica y que se estaban haciendo las cosas como correspondían, como en cualquier lugar del mundo donde una empresa debe pagar los impuestos", agregó el funcionario para quien esta situación no es novedosa, ya que "todas las empresas agroindustriales de la región tributan de la misma forma". enviar nota por e-mail | | Fotos | | Las inversiones que realizarán ambos grupos suman en conjunto u$s 90 millones. | | |