Amsafé pide que se implementen planes de salud para reducir las licencias

El gremio salió al cruce de las estadísticas oficiales que hablan de un 73 por ciento de aumento del ausentismo

"Si se conoce tan bien cuáles son los motivos de licencia de los docentes, exigimos que se implementen con urgencia programas de salud que permitan reducir sus causales". Esto es parte del contraataque con el que el gremio que agrupa a los maestros santafesinos (Amsafé), salió al cruce de los datos que indican que la derogación del presentismo disparó los pedidos de licencia de los maestros.

La información, suministrada por el gobierno y publicada ayer por La Capital, señala que las solicitudes de licencia por enfermedades de corta duración -por ejemplo, anginas y gastroenterocolitis- crecieron un 73 por ciento en toda la provincia. Y también se incrementó el número de docentes que faltaron a clase para cuidar a sus familiares.

El gremio dijo que los datos se dieron a conocer "llamativamente un día después de que Amsafé concentrara frente a Educación a delegados de toda la provincia para exigir la solución de los conflictos educativos pendientes".

Y a la hora de exponer argumentos, enumeró: "En primer lugar cabe aclarar que si bien las cifras de licencias han aumentado, esto no es tan dramático considerando el crecimiento habitual que tienen estos pedidos sobre los últimos meses del año. Y esto maximizado por la extrema situación de pobreza y el agravamiento de condiciones de trabajo en escuelas que se caen a pedazos sobre alumnos y sobre maestros que además deben hacer de asistentes sociales, padres, albañiles, médicos y psicólogos".

La secretaria adjunta de Amsafé, Sonia Alesso, relató a La Capital que la cartera educativa omitió plantear "el contexto social" en que se producen las licencias. Así, puso de relieve "el aumento de la violencia en las escuelas y otras cuestiones que inciden en las situaciones de estrés".

Según la gremialista, existen estadísticas que marcan que "en los últimos cinco años se incrementaron las ausencias por depresión y fobias", según el departamento de Salud Mental de Amsafé.

En este sentido, recordó que el gobierno no ha tomado medidas para resolver estos flagelos. "En esta provincia no hay gabinetes de psicólogos ni asistentes sociales en la mayoría de las escuelas".

De acuerdo a los registros de Salud Laboral provincial, el mayor incremento en las solicitudes de licencia se dio por las enfermedades de corta duración, como gripes, resfríos o gastroenterocolitis, que aumentaron un 73 por ciento en octubre con respecto al mes anterior. En segundo lugar se ubican las faltas justificadas por la enfermedad de familiares, que crecieron un 58 por ciento en toda la provincia.

"También hay que decir que más del 90 por ciento de los docentes son mujeres, y de ese porcentaje aproximadamente el 60 por ciento es sostén de familia; esto hace que si se enferma un hijo, a veces no hay nadie con quién dejarlo", subrayó Alesso.

"La licencia es un derecho y el Ministerio no dice que (antes de la derogación del presentismo) muchos compañeros iban a trabajar enfermos; es lógico que estas cosas aparezcan después de 15 años de pelea", añadió.

Mientras, el secretario general de Amsafé, José María Tessa, graficó: "Después de un castigo de años, aparece lo que realmente es". Tessa agregó que "lo que debería estar pensando el gobierno en vez de dar datos como si se tratara de números en vez de personas, es pensar cómo se previenen los problemas".

Así, exigió que se implementen programas de salud que permitan reducir las causales. Y opinó que "con las actitudes punitivas de Salud Laboral se pretende controlar los cuerpos. Nada se resuelve con una política de vigilar y castigar, hay que tipificar las enfermedades y generar acciones previas", remató.