| sábado, 20 de noviembre de 2004 | Para Tomás Eloy Martínez es "estéril" un contracongreso Dijo que es "injusto" crear enemistad entre las lenguas "El castellano es una lengua franca que usan los indígenas, por lo que creo que es injusto crear enemistad entre las lenguas", disparó el escritor y periodista tucumano Tomás Eloy Martínez tras su paso por la localidad de Venado Tuerto y en ocasión de participar de una charla debate, en el marco del III Congreso Internacional de la Lengua Española.
Disertó ante unas 300 personas, y allí, entre otros temas, se refirió al Primer Congreso de laS lenguaS: la reunión que finaliza hoy, de la que participa más un millar de personas y que se la bautizó popularmente como el contracongreso.
"Es estéril este congreso paralelo, debería haberse planteado el debate dentro del III Congreso", dijo Tomás Eloy Martínez al referirse al encuentro que tuvo la presencia de representantes de lenguas aborígenes y de las autonomías históricas del Estado español (País Vasco, Catalunya y Galicia).
"Las comunidades indígenas que vivían aisladas si no tuvieran una lengua de intermediación como el castellano no podrían comunicarse con otras culturas como lo hacen", señaló el autor de "Santa Evita". Y luego agregó: "La supervivencia entre las lenguas indígenas es algo que yo defiendo, pero no coincido en la creación de una enemistad entre las lenguas".
Tomás Eloy Martínez consideró estéril crear un congreso paralelo de la lengua y aclaró que se permitía el disenso sobre una iniciativa en la que reconoció participan conocidos suyos. "A pesar de ello no acuerdo con la idea de la hegemonía o el imperialismo lingüístico en el castellano; no es justo. Cuanto más lenguas conozcamos, más nos enriquecemos los seres humanos".
Coelho y Bush Al referirse a su obra negó ser un escritor popular o masivo. "Hay escritores que sí lo son y no les llego ni a los talones como por ejemplo Pablo Coelho o Isabel Allende", detalló para agregar que nunca se imaginó que la gente le pediría autógrafos o lo saludaría por algo que hace con gusto como escribir.
"La historia de la masividad empezó con la novela «Santa Evita», y la verdad es que nunca lo hubiese esperado porque la idea era vender dos o tres mil ejemplares, y sin embargo se vendieron más de 150 mil en apenas dos o tres meses", admitió.
El escritor reside actualmente en Estados Unidos (Nueva Jersey) y como no podía ser de otra manera se refirió a las últimas elecciones en ese país. "El problema del triunfo de George Bush -aseguró- no lo tienen los norteamericanos, sino el resto del mundo". enviar nota por e-mail | | |