| martes, 16 de noviembre de 2004 | Malas palabras Quiero pedirles a todos los sabios y dirigentes de los distintos países que acudirán al Congreso de la Lengua, incluyendo a los reyes, que traigan la buena nueva de ir haciendo desaparecer las malas palabras que oímos a menudo y donde ellos tienen mucho que ver. Las siguientes son sólo algunas: hambre, miseria, desnutrición, discriminación, desempleo, guerra, corrupción, odio, explotación, racismo, injusticia, inseguridad. Si algunas de ellas desaparecen comenzaremos a cambiar nuestro mundo. Empecemos cada uno, desde el lugar que ocupamos en esta bendita tierra. Este es mi deseo y que sepan los que vienen que estas palabras son realidades. Aunque se pinte la ciudad, estas cosas no pueden ocultarse.
Guillermo Tisera
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