Todos jugaron a pedir de Newell's

Los rojinegros y un fin de semana de ensueño

José M. Petunchi / La Capital

Después de las dubitativas actuaciones que tuvo ante Almagro y Lanús, no debe haber sido fácil encontrar muchos hinchas de Newell's que se imaginaran este presente inmejorable: con el equipo solo en lo más alto de la tabla a sólo cuatro fechas para la finalización del Apertura. No sólo por los puntos que se le escaparon, que hoy podrían darle una tranquilidad enorme, sino por los interrogantes y las dudas que había dejado en buena parte de esos encuentros por su funcionamiento colectivo como equipo. Era impensado, por entonces, inferir este momento que el pueblo rojinegro vive, goza y disfruta con tanto ardor y pasión de la mano de un equipo que le ha entregado varias alegrías a lo largo de este torneo.

Como la del viernes a la noche en el Nuevo Gasómetro donde obtuvo un triunfo necesario, imprescindible, vital para sus aspiraciones en este torneo. De esas victorias que sirven para semblantear el carácter de un equipo que ganó con autoridad un partido chivísimo, en el que volvió a exhibir, como no lo hacía desde Quilmes, una estructura sólida de equipo. Que tiene un esquema que generalmente no luce pero que ante el Ciclón volvió a ser eficaz y convincente. Argumentos estos que lo convirtieron en el protagonista excluyente del fin de semana del fútbol argentino.

Esto, sin embargo, que podría encarnar un punto de apoyo para el futuro, es difícil presagiar lo que puede suceder con este torneo, tan apasionante como irregular, en el que los distintos punteros fueron sintiendo el estigma de no poder mantenerse en lo más alto de la tabla. Sucedió ayer con Estudiantes, que igualó con Boca y se bajó de la cima. Ya había pasado con Vélez en un par de ocasiones y hasta con el propio Newell's. Parece que todos se sienten mejor viniendo de atrás.

Pero para llegar a este venturoso presente, hay algunos aspectos que vale la pena enumerar.

Hizo su parte: Los rojinegros fueron hasta el Nuevo Gasómetro convencidos de que el único resultado que les servía era la victoria. Y la consiguieron con autoridad, astucia, fútbol y personalidad.

Tuvo la solidez habitual: Para quedarse con los tres puntos fue determinante la solidez defensiva que exhibió. Como en la mayoría de los encuentros de este certamen, se mostró seguro, ordenado y con una voluntad inquebrantable. Además cuenta con el mejor arquero del torneo.

Recuperó la contundencia: Ante un rival muy duro, los delanteros recuperaron la autoestima, la eficacia y la contundencia. Después de varios partidos sin mojar y cuando empezaban a cuestionarse sus actuaciones, Ignacio Scocco e Iván Borghello dijeron presente en la red en el partido más indicado.

Todos jugaron para él: De los diez primeros equipos en la tabla de posiciones hasta ayer, los únicos dos que ganaron fueron Newell's y Lanús, que ahora está ubicado 5º a 4 puntos de los leprosos. Los demás, salvo la consabida derrota de San Lorenzo, igualaron todos, algunos con más dividendos que otros aunque aunque más no sea desde lo anímico.

Por lo pronto, Ñuls volvió a la punta. Es por primera vez el líder en soledad. Con 1 de ventaja sobre Estudiantes, 2 sobre Vélez y 3 sobre River. El camino al título parece habérsele despejado un poco más. Si mantiene la concentración, solvencia y el equilibrio que mostró ante Quilmes y San Lorenzo, tal vez pueda empezar a soñar con el título del Apertura.

Marino se transformó en una pieza insustituible de este Newell´s líder del Apertura.