| sábado, 13 de noviembre de 2004 | El Congreso de la Lengua para Niños finalizó luego de cuatro días de debate Miles de chicos eligieron sus palabras preferidas y prometieron cuidarlas "Amor", "amar", "jugar" y "amigos" fueron las más votadas. Los más pequeños incluyeron "mamá" y "papá" Eugenia Langone / La Capital Las dicen y las escriben, las repiten y las leen, pero pocas veces los adultos se sientan a reflexionar sobre cuáles son sus palabras preferidas. Fueron los chicos los que se tomaron ese trabajo y ayer, durante la última jornada del Congreso de la Lengua para Niños (El Congresito), votaron las 10 palabras que más les gustan del castellano. "Amor" , "amar", "jugar" y "amigos" están entre las más elegidas. Pero claro que los más chiquitos tampoco se olvidaron de "mamá" y "papá", mientras que los más grandes prefirieron "libertad".
Divididos en grupos de acuerdo a sus edades (de 4 a 6, de 7 a 10 y de 11 a 14 años) los chicos votaron las mejores palabras que luego formarán parte del Diccionario Urbano. Esta elección se realizó entre un grupo de términos que ya fueron votados por más de 100 mil personas a través de urnas que están dispuestas en centros culturales, clubes y escuelas de la ciudad. Y aunque la selección para el futuro diccionario continuará hasta el año que viene, los chicos ya eligieron sus preferidas.
Si bien "amor", "amar" y "amigos" fueron seleccionadas en los tres grupos, cada uno -de acuerdo a las edades- hizo elecciones particulares. Los más chiquitos no sólo pusieron en primer lugar "sol", sino que entre sus palabras preferidas también eligieron "bicicleta", a la que definieron como "algo que sirve para andar y dejar el tiempo atrás", y "bailar". E incluso crearon el "abrasol" y explicaron, seriamente, que no es ni más ni menos que "el abrazo que el sol le da a la Tierra y a las personas".
Los chicos de entre 7 y 10 años no se olvidaron de la "solidaridad" y de los "abrazos", pero también consideraron importante las "milanesas" y la palabra "gracias", que hace que "otro se sienta bien cuando uno la dice".
Los más grandes seleccionaron "corazón" y "paz", sin dejar afuera el verbo "trabajar" porque "ayuda a independizarse y a pensar en el futuro". Es más, remarcaron que "el que se queda sin trabajo no pueden pensar en el futuro".
Luego, todos juntos y con las manos en alto, los congresales votaron estas palabras. Pero además, se comprometieron a "defenderlas y cuidarlas".
Fueron unos 2.300 chicos los que se sumaron desde el martes y hasta ayer a esta propuesta del Congreso de la Lengua para Niños que, aunque es el primero que se realiza y surgió en el marco del III Congreso Internacional de la Lengua Española, ya logró una entidad propia. No sólo por el número de participantes, sino porque reunió a chicos de Rosario, Jujuy y Chaco, además de países como Nicaragua, Colombia, Perú, Ecuador, España, Chile, Guatemala y Paraguay.
La directora de la Isla de los Inventos e ideóloga de El Congresito, María de los Angeles Chiqui González, aseguró que "se va a seguir trabajando con los chicos de Rosario y también con los adultos sobre los temas y las problemáticas que se abordaron en estos días". Y como si fuera poco ya adelantó que "ahora la idea es hacer un libro con esta experiencia".
Es que para ella "no hay documento o registro que pueda sintetizar todo lo que los chicos han dicho y debatido en este lugar, por eso queremos hacer un libro que lo contenga todo, ya que es valiosísimo".
Los organizadores del evento destacaron "los espacios de reflexión que se lograron durante el congreso". Y fueron las conclusiones elaboradas por los propios chicos las que sorprendieron a algunos y hasta llegaron a emocionar a otros.
Además de elegir sus términos preferidos, pensaron en las palabras mismas y aseguraron que "son como suspiros que salen de la boca cuando aparece el pensamiento". Pero aclararon que no todas son iguales, porque "hay palabras livianas y pesadas: son livianas cuando se dejan pronunciar y pesadas cuando tienen las letras «r» u «o», y cuando cuesta pronunciarlas". Eso sí, "todas son de colores".
También aseguraron que "los chicos están más cerca de las palabras" y lo argumentaron: "Es porque recién las aprendimos y en la escuela hablamos más de cuatro horas todos los días, entonces practicamos todo el tiempo".
Así, los congresales recibieron ayer sus certificados, que mostraron con orgullo. Antes de irse se comprometieron a "distribuir las palabras entre todos" y a "no olvidarse de transmitirlas a los hijos". enviar nota por e-mail | | Fotos | | Los chicos votaron alzando su mano. | | |