Mortal tiro por venganza a una chica de 23 años

La hallaron en su casa de la villa de Grandoli y Spiro. Había estado detenida en la cárcel de mujeres

Daniela Ibarra antenoche yacía en su casa de la villa del Tanque, en la zona sureste de la ciudad, con un balazo en el abdomen. Un grupo de vecinos de la villa de Grandoli y Spiro apuraban los pasos para socorrerla. La chica, de 23 años, había recibido un proyectil en el abdomen en el desenlace de una discusión con otras dos mujeres. A duras penas, quienes la ayudaron pudieron llevarla al Hospital de Emergencias y allí murió en el amanecer de ayer.

Hasta anoche, los pesquisas no tenían muchas certezas acerca de cómo se desencadenó el suceso, aunque presumían que los motivos del crimen había que buscarlos en una venganza. La chica asesinada, según precisó una alta fuente de la Agrupación Unidades Especiales, era una "mechera" que había cumplido una condena en la cárcel de Mujeres.

Cerca de las 20 del lunes, los habitantes del asentamiento precario de Convención y 24 de Septiembre corrían alborotados. Un estampido de un arma de fuego los había sobresaltado. Un rato antes, según indicó una fuente de la investigación policial, Ibarra había discutido con otras dos mujeres por cuestiones que no fueron explicadas.


Nueve horas de agonía
El incidente terminó de la peor manera. Una de las contendientes gatilló un arma de fuego y un proyectil atravesó el abdomen de la mujer, que se desplomó malherida en su casa de Cepeda 3813, a unos pocos metros del tanque de Aguas Provinciales de Abanderado Grandoli y el pasaje Spiro. Allí la encontraron algunos vecinos, que acudieron alertados por la detonación.

Al parecer, como la ambulancia demoraba en llegar, quienes la socorrieron la subieron con premura a un auto y la llevaron al Clemente Alvarez. Agonizó unas nueve horas. Y cuando ya eran las 5 de la mañana su vida se apagó.

La chica tenía hijos de un matrimonio anterior y su actual pareja, según voceros de la Jefatura, era un hombre con prontuario abierto que unos meses atrás había salido en libertad de un presidio santafesino. "Cumplió una condena por robo calificado en la cárcel de Coronda", dijo el portavoz consultado.

Hasta anoche, los pesquisas no tenían pistas sobre el autor del disparo mortal. "Sabemos que la mataron por un ajuste de cuentas, pero no conocemos los motivos", explicó el comisario Daniel Corbellini, jefe de la Brigada de Homicidios.