| miércoles, 03 de noviembre de 2004 | El plantel leproso asimiló con madurez la derrota Mauricio Tallone / La Capital Está claro que no fue el regreso esperado a las prácticas por el plantel de Newell's. Aunque esa certeza no invalida la sensación de que los jugadores rojinegros asimilaron con madurez el porrazo que se dieron el domingo pasado contra Almagro. Por lo pronto ayer en Bella Vista no se escucharon voces de disconformismo y la mirada se focalizó en el partido del fin de semana contra Lanús en el Coloso.
Tampoco hubo gestos que denunciaran mal humor ni recriminaciones para nadie. Todos coincidieron en que una tarde errática la puede tener cualquiera y una caída por más dura que sea no es motivo para perder la calma. Por eso el grupo aunó fuerzas puertas adentro, cumpliendo con el acostumbrado ritual de la introspección para no darse manija más de la cuenta.
Durante el entrenamiento, el semblanteo de los jugadores y sus movimientos dejaron traslucir esas impresiones. Los más jóvenes picaron en punta y la experiencia quedó situada en el pelotón de atrás. En esta rutina se los vio a Capria, Rosada, Maidana y Ortega intercambiando palabras mientras trotaban.
El arranque de los trabajos propiamente dicho se demoró un buen rato debido a que Gallego estuvo reunido con el plantel en el vestuario. Allí se celebró una charla grupal que es habitual después de cada partido, aunque en esta ocasión seguramente sirvió para pulir algunas cuestiones colectivas que no se hicieron bien contra Almagro.
"El técnico siempre charla con nosotros luego de cada partido y es lógico que después de una derrota el grupo analizara las causas de lo que pasó", reconoció Villar.
El Mago Capria fue otro de los que entendió este paso en falso sin dramas.
"El equipo en algún momento iba a perder. Ahora hay que dar vuelta la hoja y poner la mente exclusivamente en Lanús porque todavía estamos punteros. Además ninguna derrota nos va a sacar la convicción de que vamos por el buen camino. El grupo está tan fuerte como antes de la derrota. Si alguien pensó que no íbamos a perder se equivocó. Es utópico eso. El Real Madrid tiene un plantel de 200 millones de dólares y pierde igual. Por qué no vamos a perder nosotros", tan clarito como su pegada, el Mago Capria pintó el cuadro de situación.
Ariel Rosada tampoco se alejó de la idea de todos. Para el volante central "lo de Almagro ya es historia. El grupo sacó las conclusiones que tenía que sacar y ahora hay que pensar solamente en Lanús". enviar nota por e-mail | | Fotos | | El Tolo Gallego habla y el grupo lo escucha con atención. | | |