| miércoles, 27 de octubre de 2004 | Sharon logró la aprobación parlamentaria para su plan de retirada de la Franja de Gaza El apoyo del opositor partido Laborista de Shimon Peres fue decisivo en una votación considerada histórica Jerusalén. - Al dar su aprobación en una votación considerada histórica al plan de repliegue de la Franja de Gaza, los parlamentarios israelíes sacaron ayer tarjeta roja a los colonos judíos radicales. Tras un arduo debate de dos días en la Knesset, el primer ministro Ariel Sharon obtuvo por fin el apoyo que necesitaba para una evacuación de los asentamientos y de los puestos militares en esos territorios ocupados gracias a la ayuda del opositor partido Laborista de Shimon Peres.
Unas 15.000 personas salieron a las calles frente al Parlamento para manifestar su apoyo o rechazo al resultado de la votación. Las escuelas de los asentamientos de toda Cisjordania y la Franja de Gaza permanecieron ayer cerradas para que los niños pudieran participar en las protestas.
Según una encuesta reciente, una mayoría de dos tercios de israelíes está a favor del plan de repliegue, con lo cual los sectores radicales están aislados.
El plan previsto por el premier para la evacuación el próximo año de 21 asentamientos en la Franja de Gaza y cuatro en Cisjordania prevé que el repliegue se instrumentará en primera instancia a través de un programa basado en la voluntad de los colonos y en un sistema de compensación financiera para la reubicación de las familias fuera del territorio ocupado.
Posteriormente, se pasará a la intervención de las unidades policiales y militares, que sacarán por la fuerza a los colonos de los asentamientos a evacuar.
Pero, por otra parte, es todavía incierto si la coalición de gobierno sobrevivirá a la aprobación de este plan de repliegue. Tanto en la votación parlamentaria como en las manifestaciones en las calles se evidenció ayer una nueva alianza.
Sharon había amenazado con despedir a todo ministro o viceministro que votara en contra del plan e, inmediatamente después de la votación, entregó las cartas correspondientes al ministro sin cartera Uzi Landau y al viceministro de Comercio e Industria, Michael Ratzon, que lideraron la oposición al plan dentro del Likud.
Líder de una nación El valor de Sharon "radica en la decisión de ser líder de la mayoría del pueblo y no líder del Partido Likud; líder de la nación y no líder de unos asentamientos", comentó el periódico Jediot Achronot.
Mientras tanto, los sectores opositores o escépticos se concentran en la demanda de una consulta popular que permita retrasar el repliegue. Minutos antes de la votación parlamentaria, el ministro de Finanzas, Benjamin Netanyahu, y el de Educación, Limor Livnat, se habían manifestado justamente a favor de convocar un referendo sobre el tema.
El Partido Nacional Religioso y destacados ministros del bloque Likud amenazaron ya con abandonar la coalición si no se convoca a una consulta popular en un plazo no mayor de 14 días. A la amenaza se sumaron Netanyahu y Livnat. El problema radica en que el Partido Laborista podría retirar su apoyo a Sharon si éste decide efectivamente convocar a un referéndum nacional. (DPA) enviar nota por e-mail | | |