Mayoristas y minoristas se recuperan más rápido que el sector corporativo

Más servicios detrás de los fierros informáticos

Los empresarios rosarinos suman prestaciones para fidelizar clientes y mejorar los escasos márgenes

Marcos Cicchirillo / La Capital

Una recorrida por el negocio rosarino de hardware permite detectar fenómenos diferenciados según el nicho de la actividad en el que se desempeñan los ensambladores y comerciantes de computadoras.

Operadores mayoristas, minoristas y los que atienden el mercado corporativo consultados por La Capital analizaron la situación del sector y las perspectivas de cara al 2005.

La retirada de los jugadores multinacionales en el segmento mayorista abonó el terreno para que las empresas locales mejoraran sus posicionamiento aún por encima de los guarismos alcanzados en la mejor época de la convertibilidad. Así, las compañías locales se expandieron hacia otras provincias y pueblos del interior de Santa Fe.

En cambio, las empresas dedicadas al rubro corporativo y pyme no escaparon al cambio de la ecuación económica que se produjo en el país, donde la reactivación llegó de la mano del sector industrial. Los históricos clientes que tenían al sector como proveedor, como bancos, aseguradoras, y empresas de servicios públicos, salvo excepciones sólo gastan para cubrir parches. Surge un mercado alternativo entre las industrias más dinámicas de esta época pero la recuperación es lenta.

Fabio Almagro, directivo de Hardtec, indicó que las ventas en lo que va de 2004 crecieron entre el 50% y 60% en comparación con igual período de 2003 pero "todavía estamos bastante lejos del ritmo de actualización tecnológica que existió durante la convertibilidad".

Sebastián Soraco, directivo de Sigma, coincidió con Almagro en que "ahora se está vendiendo un poco más" pero remarcó que el impulso del crecimiento de las compras de computadoras llegó de la mano del sector productivo como frigoríficos, industrias y pymes, que antes conformaban la parte más chica de la torta corporativa, muy lejos del sistema financiero y de las empresas de servicios en general.

De todas formas, Mario Vignolo, directivo de Belt, apuntó que dentro de sector servicios en los últimos meses "empezó a producirse un respiro después del parate total" y puso como ejemplo el caso de un banco regional que cambió de manos, y después de tres años sin realizar prácticamente inversiones decidió reimplementar un plan de actualización informática.

Soraco explicó que las firmas del sector incorporaron servicios y nuevas líneas de productos como grandes servidores a su cartera. Esto condujo que la mayoría de los empresarios incorporara personal en áreas técnicas.

En este sentido, Almagro señaló que las pymes incrementaron sus pedidos de soporte de sistemas operativos, cableado estructurado, conectividad, periféricos, garantías, seguridad informática y a medida que es más grande la empresa la compra de notebook.

Soraco consideró que el impulso se notaría más si volviera la financiación, ya que en la actualidad apenas existe -según el caso y los antecedentes- crédito a 7 y 30 días. Por ahora los mayoristas y las grandes compañías se mantienen bastante firmes con que las compras son al contado.


El consumo de la gente
En tanto, las firmas enfocadas al negocio minorista recuperaron terreno a paso firme desde mediados de 2003 hasta hace un par de meses, cuando la demanda entró en una especie de amesetamiento y los comerciantes comenzaron a plantear la importancia de recuperar un sistema de financiación para fogonear el consumo.

"El crecimiento se planchó, el uso de la tarjeta de crédito a tasa cero durante la primera mitad de año influyó mucho en las ventas del mercado minorista", apuntó Marcelo Alesso, gerente de Pascal.

Alesso estimó que la venta de computadoras alcanzó e incluso superó -como ocurrió en el mes de julio- el volumen que se dio a fines del milenio, en un mercado potenciado por la burbuja puntocom y el temor al Y2K. La opinión no es generalizada, ya que otros empresarios sostienen que las ventas permanecen aún por debajo de esos niveles.

Pablo Parent, directivo de Grupo IT, consideró que la fuerte recuperación se debió a que "la gente se estaba poniendo al día" en tecnología informática. También hubo empresarios que admitieron que las ventas cayeron en el último bimestre un 30% y los que consideraron que entraron en un período tipo serrucho en sus ventas.

Mario Vignolo, titular de Belt, explicó que la mayor renovación de máquinas se centró en aquellos que tenían modelos 98/99 y que habían retrasado el recambio tecnológico debido a la crisis económica.

Sergio Airoldi, directivo de la firma que llega su apellido y de AIR (la pata mayorista y su principal negocio), prevé que recién volverá a mejorar el crecimiento de las ventas a partir del segundo trimestre de 2005. "Pero habrá que ir olvidándose que el crecimiento será al ritmo vimos desde mediados de 2003 hasta hace un par de meses", aclaró.

La recuperación de las ventas de hardware se notó mucho más en el segmento mayorista, producto de la nacionalización del mercado tras la salida de fuertes jugadores internacionales, que llevó a las empresas locales como AIR a duplicar sus ventas respecto aún de sus mejores épocas en el uno a uno.

Airoldi resaltó dos factores adicionales: el efecto soja en el interior y la estrategia de expansión comercial hacia otras provincias, principalmente Buenos Aires y acuerdos más directos con las compañías proveedoras.

Al mismo tiempo, algunos mayoristas porteños decidieron hace lo mismo y posaron su mira en el mercado rosarino. "La competencia a va venir", admitió Airoldi, quien no teme al arribo de nuevos actores: "Antes estaban las compañías internacionales e igual crecimos".