| miércoles, 20 de octubre de 2004 | El debate para analizar los presupuestos de 2001 y 2002 no pudo concluir La Asamblea Universitaria terminó en un escándalo con empujones y huevazos Un grupo de estudiantes arrasó con sillas, mesas y computadoras. El rector dijo que habrá "sanciones" La sesión de la Asamblea Universitaria que debía discutir ayer un informe elaborado por una comisión sobre el presupuesto 2001 y 2002 terminó convirtiéndose en un verdadero campo de batalla, donde un grupo de estudiantes ligado a agrupaciones de izquierda agredió a autoridades y consejeros. No sólo hubo huevazos, harina, escupitajos y empujones en el salón de actos de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), sino que también volaron sillas, mesas y una computadora. El rector, Ricardo Suárez, aseguró que "todo fue preparado porque ya llegaron con huevos y harina", y adelantó que "se realizará una información sumaria y se reunirán los elementos probatorios para después accionar contra los responsables". Si bien reconoció que esas personas "están identificadas", Suárez dijo que "antes de decirlo, hay que probarlo".
A las 9.30 se abrió el debate que principalmente debía analizar un informe de una comisión ad hoc que estudió el presupuesto entre 2001 y 2002, y que señaló entre sus conclusiones que en la UNR hubo designaciones "nocivas e irregulares".
Ya desde el principio, mientras se debatían los informes de la comisión, comenzaron las agresiones hacia los consejeros por parte de un grupo de estudiantes que ocupaba el segundo piso del auditorio. Desde allí, cayeron bollos de papel de diario, que mientras se extendía la discusión se convertían en papeles mojados, huevos y harina.
A pesar de las agresiones, los asambleístas dieron a conocer diferentes propuestas y el decano de la Facultad de Derecho, Ricardo Silberstein, presentó su proyecto que comenzó a votarse mientras el ambiente se recalentaba cada vez más.
Tal es así que una vez que la propuesta fue aprobada con unos 140 votos, un grupo de estudiantes descendió del segundo piso, subió al escenario y comenzaron las agresiones. Hubo empujones, escupitajos y huevazos entre los estudiantes y las autoridades de la Universidad.
Lo cierto es que el escenario se convirtió en un verdadero campo de batalla, donde quedaron sillas desparramadas, mesas tiradas, trozos de vidrios por todos lados y computadoras destrozadas en el piso.
Aunque el rector prefirió "investigar antes de dar la identidad de estas personas", entre los estudiantes había miembros de agrupaciones de izquierda, como Alde, Santiago Pampillón y el MST.
El dirigente del Alde, Diego Ainsuain, explicó que este grupo de estudiantes reclamaba que "se debatieran todos los despachos de la comisión y otros temas que no se plantearon". Y si bien reconoció que "los estudiantes ingresaron y empezaron a cantar", aseguró que "hubo provocaciones por parte de las autoridades que empezaron a gritar".
Lo cierto es que el debate quedó inconcluso. El secretario general de la Federación Universitaria de Rosario (FUR), Laureano Sanmartino, no sólo manifestó su "repudio a estas actitudes", sino que además indicó que "había otras propuestas, como un pedido a la Nación de aumentar el presupuesto, que no se discutieron".
Ahora la Universidad realizará una investigación para "probar quiénes fueron los responsables de estos hechos" y Suárez indicó que "las sanciones pueden ir desde la separación del alumno de la Universidad hasta la realización de una denuncia penal". enviar nota por e-mail | | Fotos | | Sobre el escenario del salón de Ingeniería quedaron restos de huevos, harina y vidrios. | | |