| domingo, 17 de octubre de 2004 | Instantánea "Las cartas de mi papá estaban en el último cajón de la cómoda de mi mamá -recuerda María de la Paz Georgiadis-. Yo las miraba cuando era chica para ver si me nombraba. Sólo leía cuando me aludía a mí, tal vez porque me parecía difícil el vocabulario. Pero esas cartas sobrevivieron a un exilio y a infinidad de mudanzas. Y sobrevivieron fotos y la alianza de hueso que hizo mi papá en la cárcel para mi mamá, para celebrar una reconciliación en su relación a distancia, porque nunca se vieron desde el momento en que él cayó preso. En mi familia se han perdido muchas cosas, pero las cartas y las fotos quedaron". enviar nota por e-mail | | |