| domingo, 17 de octubre de 2004 | Propuesta para disminuir las pérdidas durante y después de las cosechas Anualmente se pierden u$s 1.500 millones en este concepto. Hubo un curso de capacitación de maquinarias Silvia Carafa / La Capital Firmat. - Por pérdidas en cosecha y poscosecha, el campo deja de recaudar unos 1.500 millones de dólares por año. La cifra fue indicada por los técnicos del Inta Manfredi de Córdoba y puso en guardia a productores, operarios y encargados de maquinarias agrícolas, y trabajadores rurales que llegaron a esta ciudad para asistir a un curso de capacitación para el manejo y la optimización del uso de cosechadoras. Claro que los fierros no son los únicos responsables del hecho, también cuentan la semilla y los demás parámetros de la siembra y la recolección.
El ingeniero agrónomo Mario Bragachini, coordinador del proyecto Eficiencia de Cosecha y Poscosecha, del Inta Manfredi, fue categórico al respecto: unos 700 millones de dólares anuales quedan en el camino en la cosecha de soja, maíz, girasol, trigo y sorgo, y de los cultivos regionales porotos, maní y arroz. Pero no es el único déficit. En la etapa de poscosecha, los especialistas calculan un déficit similar.
Entre las causas de las pérdidas está el mal uso de las maquinarias, la falta de uniformidad en la siembra, la presencia de insectos y malezas, el momento inoportuno de cosecha, el ineficiente manejo de granos en planta de acopio o en los silos de campaña y el estado de los camiones, de las rutas y caminos, así como el mal secado.
Para Bragachini, la rentabilidad de los cultivos cayó en una proporción de tres a uno, con respecto a las últimas temporadas, hecho que convierte a las pérdidas en datos más que significativos. "Este es el momento de pensar en la eficiencia porque el alquiler por hectárea es muy alto, igual que el costo de la tierra y el aumento en dólares de algunos insumos", agregó.
El técnico del Inta señaló que, según las condiciones de las cosechas, las pérdidas pueden alcanzar un rango que va desde el 15 al 70 por ciento de las ganancias. "Este tipo de cursos es para que las pérdidas sean mínimas ya que no se puede estar trabajando todo un año para dejar de ganar un 70 por ciento por una mala eficiencia en cosechas o poscosechas", describió.
Además dijo que esos porcentajes se corrigen con inversiones. "Hace un año y medio venimos trabajando para generar conciencia, porque se estaba invirtiendo poco en equipos de cosecha y poscosechas", explicó Bragachini. Y agregó que los buenos vientos que soplaron para el campo en los últimos años, le permitió al productor orientar sus inversiones. En tal sentido señaló que la venta de cosechadoras pasó de 560 en 2002, a 2.300 en 2003, mientras que la proyección para este año es de 2.500 unidades. "Pero a las máquinas hay que hacerlas funcionar en forma correcta, por eso hacemos este tipo de cursos para capacitar y concientizar", enfatizó.
El secretario de la Promoción del Desarrollo Económico de la Municipalidad de Firmat, Miguel Garrofé, destacó la importancia de que esta ciudad haya sido la sede del curso ya que cuenta con una de las pocas fábricas de cortetrillas que existe en el país. En la organización del curso también participó el Inta Venado Tuerto.
La importancia del valor agregado Según el ingeniero agrónomo José Peiretti, también del Inta Manfredi, en los próximos tres años, se apunta a disminuir en un 20 por ciento las pérdidas cuantitativas y cualitativas en cosecha y poscosecha de granos en la Argentina. En el primero de los casos, se trata de las pérdidas de kilos por hectáreas o toneladas producidas y en el segundo se trata de una nueva línea de trabajo del Inta, que busca la obtención de producto con calidad necesaria como para sumarle valor agregado. enviar nota por e-mail | | |