| domingo, 17 de octubre de 2004 | Ley de lemas "chacarera" Los efectos nocivos que demostró tener la ley de lemas (posibilidad que gane un candidato sin ser el más votado, proliferación de sublemas y candidatos, transferencia de votos, clones), resultan un conjunto de picardías ampliamente conocidas y sufridas por todos nosotros, los ciudadanos. Pero...esta suerte de emparche que se le pretende dar al sistema electoral en nuestra provincia, ideado socarronamente y convalidado de prepo por senadores justicialistas, deja expuesta la magnitud de la estafa extremadamente perversa a la que nos quieren someter. Porque es perverso ampararse en "las realidades de las comunas y municipios pequeños" (según dicen de segunda categoría, lenguaje bastante vetusto por cierto), para sostenerse en el poder con centenares de sublemas y seguir produciendo confusión y lo más importante: que no vean las boletas opositoras. El senador Traferri como defensor de este proyecto -sancionado en el Senado provincial con menos de la mitad del cuerpo a favor y desconociendo el artículo 42 de nuestra Constitución provincial que lo hace inconstitucional- dijo que "hay más de 150 localidades que presentaron candidato único (PJ) en las últimas elecciones, dónde la ley de lemas no tiene sentido"; toda una evidente contradicción (¿defensa o acto fallido?). Lo real es que fueron 111 localidades con candidatos únicos, pero... con 517 sublemas. La provincia tiene 315 comunas y 46 municipios (sin contar Rosario ciudad y Santa Fe), o sea 361 localidades. Si tomásemos como referencia las palabras del senador y además dejamos de lado a Rosario y Santa Fe representando el 40% del electorado provincial; cuál sería la razón para no derogar totalmente la ley de lemas y activar lo que yo llamo lemas chacareros? Tenemos que tener bien en claro que no es lo mismo candidato único que lista única. Y este es el punto. Existen cientos de ejemplos, veamos sólo uno: Piaggio, pequeña localidad del departamento San Jerónimo, tiene 102 electores y dos mesitas habilitadas para sufragar, el PJ se presentó con candidatos únicos, pero con seis sublemas y así pudo ganarle a la Junta Vecinal que tenía lista única. Tener elecciones sin lemas para gobernador, diputados y senadores, que Rosario y Santa Fe vayan hipotéticamente sin lemas para todos los cargos electivos, es sencillamente cambiar para que nada cambie. El resto del escenario electoral que componen las 361 localidades que en general traccionan de abajo hacia arriba representan el 60% o sea 1.285.839 electores cautivos de los sublemas. Si acaso esta suerte de emparche llegase a prosperar entre las idas y venidas de la Legislatura santafesina, lo que completará la trampa y está cantado por la larga praxis justicialista, es que horas antes de los comicios el tribunal electoral adicto establezca sin problemas la boleta "supersábana" que garantiza el arrastre. Y colorín colorado.
Marité Yanos, DNI 13.488109 enviar nota por e-mail | | |